La empresa buscará una cartera diversificada, atendiendo tanto al mercado regulado como al mercado libre.
Agencia Reuters.- La petrolera angloholandesa Shell, planea invertir 3.000 millones de reales para 2025 en proyectos integrados de energía renovable en Brasil, la mayor parte para el desarrollo de proyectos solares, dijeron el martes ejecutivos de la compañía.
Actualmente, la compañía tiene seis proyectos solares en desarrollo, con una capacidad de generación de más de 2 GW, y espera alcanzar aproximadamente 5 GW para fines de este año.
«El foco principal es el desarrollo del negocio solar, que son los proyectos más avanzados», afirmó el director de Renovables y Soluciones Energéticas de Shell Brasil y Shell Energy, Guilherme Perdigão.
El desarrollo de la central térmica Marlim Azul, que será alimentada con gas natural del presal de Macaé (RJ), posibles nuevos proyectos de generación de gas y la ampliación de su capilaridad comercial, entre otros, también serán el foco de estos. inversiones en los próximos años.
Entre los proyectos solares, Perdigão mencionó un acuerdo de cooperación anunciado recientemente para la creación de una empresa conjunta con Gerdau, para el desarrollo de un parque fotovoltaico en Brasilândia de Minas (MG). Se podría tomar una decisión de inversión a finales de este año.
«Estamos dispuestos a realizar nuevas inversiones en joint ventures de generación de energía limpia», dijo Perdigão, durante una conferencia de prensa digital para el lanzamiento de Shell Energy en Brasil, un segmento de la empresa enfocado en descarbonización, energía limpia y productos ambientales.
El negocio de Shell Energy Brasil producirá y comercializará electricidad limpia a partir de plantas de energía solar y eólica, y energía baja en carbono a partir de gas térmico, además de ofrecer productos ambientales como Certificados de Energía Renovable y compensaciones de carbono.
La empresa buscará una cartera diversificada, atendiendo tanto al mercado regulado como al mercado libre. Perdigão destacó que Shell ve a Brasil como una de las cuatro regiones prioritarias para las operaciones de Shell Energy, junto con Estados Unidos, Australia y Europa Occidental.
