Además, la compañia distribuyó más de 38 mil árboles en comunidades vecinas a través de campañas de reforestación.
Industrias Peñoles informó que el 40% de la energía generada para el autoabastecimiento proviene de fuentes renovables desde 2020. En el marco del Día Internacional de la Madre Tierra, la compañía comentó que el 71% del agua utilizada en los procesos proviene de aguas residuales municipales tratadas y de recirculación.
En conjunto con Fresnillo plc, Industrias Peñoles buscan dar cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible dictados por las Naciones Unidas; bajo esta línea, refrendar la importancia de la salvaguarda y defensa del medio ambiente.
Rafael Rebollar, director general de Industrias Peñoles, y Octavio Alvídrez, director general de Fresnillo plc, coincidieron en que el cambio climático es un tema de interés global prioritario para ambas compañías.
Igualmente, remarcaron que ante este panorama es indispensable que desde cada sector o industria, se encuentren opciones y se tomen acciones orientadas a la reducción de la huella ecológica y preservación del medio ambiente.
“El cuidado del medio ambiente es fundamental para nosotros como empresa. Desde Peñoles promovemos arduamente la protección y conservación de la naturaleza”, comentó Rafael Rebollar.
Asimismo, agregó, tienen el objetivo de alcanzar cero impactos ambientales significativos.
En tanto, Octavio Alvídrez, apuntó que, para la empresa, “la única forma de seguir creciendo es hacerlo de manera sostenible; es decir, bajo los principios de respeto a la diversidad, equidad e inclusión social, y con prácticas amigables con el medio ambiente”.
Adiconalmente, señaló que la compañía mexicana tiene como objetivo limitar el impacto ambiental de sus operaciones durante todo su ciclo de vida; aumentando el uso de recursos renovables e invirtiendo en la conservación.
Ambas compañías contemplan cinco aspectos ambientales prioritarios: reducir el consumo de energía; disminuir el consumo de agua fresca a través de la reutilización; contener polvos y minimizar las emisiones de dióxido de carbono (CO2); maximizar la reutilización de materiales, asegurar la contención adecuada de residuos; y proteger a la flora y fauna endémicas de sus zonas operativas.