La IA es una herramienta que permite la toma de decisiones basada en analítica de datos.
En el Perú, las industrias como la minería, acuicultura y agricultura pierden alrededor de un 20% de sus ingresos por la gran variabilidad en sus productos terminados y la falta de eficiencia en el uso de recursos críticos como agua, electricidad y combustibles.
Y es que este tipo de industrias es uno de los pilares esenciales para la economía peruana, pues, por ejemplo, solo el sector minero exportó un valor de 3069 millones de dólares durante mayo del presente año, según el Ministerio de Energías y Minas.
Ser capaces de generar un impacto mínimo se traduce en una capacidad de generar valor en millones de soles, a nivel empresarial y país.
La inteligencia artificial (IA) ha sido incorporada por varios grupos empresariales para optimizar procesos y mejorar la rentabilidad considerando que existe un histórico de información que se ha ido generando gracias a la sensorización, IoT y sistemas de almacenamiento de data.
Francisco Paredes, Director Comercial de Altum Lab, nos explica el beneficio de incorporar esta tecnología para la optimización de cosecha en empresas de nuestro país.
Optimización de procesos
La inteligencia artificial es una tecnología basada en algoritmos matemáticos, con la capacidad de optimizar un proceso considerando múltiples fuentes de información y variables tanto productivas como restrictivas.
Su uso permite optimizar procesos complejos que con las actuales herramientas tecnológicas no sería posible, disminuyendo los tiempos de planificación y toma de decisiones.
En la minería la tecnología es utilizada para predecir la composición de las materias primas provenientes de la mina, o de productos provenientes de proveedores, con lo cual es posible implementar estrategia de segmentación y mezcla, mejorando la alimentación a procesos donde la variabilidad afecta el rendimiento y costo.
Mejorar la toma de decisiones
Los gerentes de diferentes industrias toman decisiones clave todos los días. La IA permite sugerir cambios en la operación, proyectando escenarios productivos óptimos, ya sea para rentabilizar la materia prima o para satisfacer de mejor forma los contratos comerciales.
Dentro del sector acuícola, esta tecnología es capaz de planificar la estrategia de cosecha considerando el crecimiento de una biomasa, las capacidades de planta y las múltiples restricciones operativas.
La predicción de precios permite sugerir cuándo es mejor cosechar considerando la rentabilidad del producto por mercado.
Aumento de la rentabilidad
Según Paredes, el sector empresarial en el Perú es consciente del soporte que brinda la tecnología, por lo que cada vez es más común el uso de estas herramientas para la rentabilidad del negocio.
“En ese sentido, nuestra plataforma Bruna, permite, a partir de data histórica de las empresas extractivas, dar información clave para la toma de decisiones y mejorar la rentabilidad dentro de estas”, agregó.
Disminución de la variabilidad
Las industrias extractivas están sometidas a una serie de factores que son aleatorios y que impactan en la fabricación de sus productos. Esta variabilidad se debe a causas especiales entre las cuales destacan la mano de obra, medio ambiente, materiales, entre otros.
Con la implementación de la inteligencia artificial, hay una disminución de esta variabilidad, pues este tipo de tecnología se nutre de información histórica de la empresa y de los procesos de producción para tener una mejor producción.
“La IA ha llegado para quedarse y ser una de las herramientas con mayor proyección en el Perú. Estamos viviendo una completa revolución dentro de las empresas extractivas, donde es posible hacer más eficientes los procesos y lograr compañías más sostenibles y competitivas en el tiempo. Existen además incentivos de parte del gobierno donde es posible utilizar el beneficio tributario permitiendo así un bajo o nulo costo en su inversión”, finalizó el director comercial de Altum Lab.