Requeridos en varios sectores, los montacargas y apiladoras son usados –en su mayoría- con el propósito de movilizar ciertos tipos de cargas, a fin de trasladarlos, de un punto a otro, de manera rápida y eficaz, logrando así una producción sin contratiempos, sobre todo en la minería que requiere de la mayor eficiencia posible.
Definidos como vehículos de transporte que pueden ser utilizados para mover, remolcar, empujar, subir o bajar distintos objetos, los montacargas son empleados en el sector minero por su facilidad y practicidad al momento de usar.
La carga que soporta, es balanceada por un centro de gravedad, que se mece en todas las direcciones y así determina su estabilidad.
En cuanto a las apiladoras, son máquinas fabricadas en metales ligeros y plásticos, y son ideales para el trabajo en espacios pequeños. Caracterizadas por la productividad, operatividad y seguridad que brindan, estos equi pos están formados por dos brazos paralelos con ruedas en sus extremos en forma de horquilla, que se unen a un cabezal donde se sitúan los manos y unas ruedas de mayor tamaño.
Cabe indicar que los montacargas pueden ser de combustión interna o eléctricos. En el primer caso tienen un motor que funciona a base de combustible, ya sea diésel, GLP o gasolina, mientras que los segundos tienen un motor que funciona con baterías recargables de alta duración, por lo que no emiten contaminantes como el CO2, y su consumo de energía es bajo, además son poco ruidosos y recomendables para trabajar en interiores.
MEDIDAS DE PRECAUCIÓN
Los montacargas, si bien son fáciles de usar, pueden resultar peligrosos por su gran tamaño y pesadez. Debido a ello, pueden sufrir volcaduras, por lo que se recomienda tener mucho cuidado con la velocidad con la que se maneja, como también con los peatones en sus alrededores, ya que en los campamentos mineros hay gran cantidad de colaboradores.
Si bien es cierto que el mercado de montacargas, en nuestro país, se ha innovado con nuevas tecnologías -debido a las demandas del sector- se deben mantener ciertos cuidados al momento de operarlas, para evitar futuros accidentes, desde leves a graves. Y aunque es muy importante estar equipados con la mejor tecnología, también lo es contar con un personal muy bien calificado para operar estos equipos.
Estos operadores deben estar preparados para usar la maquinaria de manera adecuada, siguiendo las reglas de seguridad.
Lea el informe completo en nuestra edición 149 de Rumbo Minero