Las detenciones en PDVSA habrían sido por una investigación sobre el zarpe de barcos con cargamentos petroleros de exportación sin el pago de la debida compensación a la empresa.
Reuters.- El ministro de Petróleo de Venezuela, Tareck El Aissami, dijo el lunes que renunció a su cargo por las investigaciones sobre corrupción en PDVSA, en el mayor y más reciente giro tras una serie de detenciones en entidades oficiales.
«En virtud de las investigaciones que se han iniciado sobre graves hechos de corrupción en PDVSA; he tomado la decisión de presentar mi renuncia como Ministro de Petróleo, con el propósito de apoyar, acompañar y respaldar totalmente este proceso», dijo El Aissami, que ocupaba el cargo desde el 2020.
El Aissami, de 48 años y sancionado en 2017 por Estados Unidos por narcotráfico y a quien se le atribuía haber ayudado a PDVSA a sortear las medidas de Washington, no dio detalles sobre esas investigaciones de corrupción en el seno de la petrolera.
Más temprano, tres fuentes con conocimiento del caso dijeron a Reuters que había sido detenido el coronel Antonio Pérez Suárez, ex vicepresidente de comercio y suministro de PDVSA. El también coronel Samuel Testamarck, gerente general de PDV Marina, filial marítima de la petrolera, fue otro de los capturados, según otras dos fuentes.
Las detenciones en PDVSA habrían sido por una investigación sobre el zarpe de barcos con cargamentos petroleros de exportación sin el pago de la debida compensación a la empresa. Otros funcionarios de la compañía han sido suspendidos de sus cargos por la misma pesquisa, dijo una de las fuentes.
La Fiscalía no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios sobre ese caso.
La Policía Anticorrupción de Venezuela detuvo a un funcionario, dos jueces y un alcalde por casos de corrupción, en inusuales operativos dentro del oficialismo.
El cuerpo de seguridad dijo en un comunicado divulgado por la televisión oficial que habían sido capturados el superintendente de criptoactivos Joselit Ramírez, y los jueces Cristóbal Cornieles y José Márquez García, además de Pedro Hernández, alcalde de Las Tejerías, una zona al centro del país que a fines del pasado año sufrió daños por inundaciones.
No se han revelado oficialmente ni los cargos ni los casos específicos de corrupción en los que estarían involucrados los detenidos. Este tipo de operativos, que comenzaron el viernes, son poco frecuentes en la administración pública de Venezuela, marcada por la opacidad de sus gestiones, según grupos no gubernamentales como Transparencia Internacional.
La Fiscalía General dijo en un comunicado el domingo en la noche que nombró a cinco fiscales para investigar los casos y agregó que los «ilícitos corresponden a distintas ramas del Poder Público e implican a sectores estratégicos para el desarrollo nacional», pero no ofreció detalles.
Joselit Ramírez, quien desde 2018 estaba al frente de la Superintendencia Nacional de Criptoactivos y Actividades Conexas (Sunacrip), encargada de la oferta del petro -la moneda digital venezolana-, fue destituido y el presidente Nicolás Maduro designó una junta para reestructurar la cartera, según la Gaceta Oficial divulgada el sábado.
Ramírez estaría siendo investigado por casos vinculados a PDVSA, según reportes del diario Últimas Noticias, cercano al gobierno.
La detención de los funcionarios es una de las mayores redadas desde que en 2017 la Fiscalía realizó a lo largo de varios meses la captura de ejecutivos e imputó a dos expresidentes de PDVSA.
En 2018, el Ministerio Público también solicitó la captura de funcionarios de la petrolera por irregularidades administrativas que afectaron las operaciones de los mejoradores de crudo.