Movilizar materiales es una de las tareas constantes en el sector minero, por esa razón las empresas del rubro optan por adquirir camiones de carga con mayor capacidad y resistencia, que les permita conseguir ahorro en los costos por cada viaje realizado.
Ya sean camiones mineros, tractos o volquetes, estas unidades -gracias a las nuevas innovaciones- se han convertido en equipos más eficientes en su funcionamiento, logrando mayor productividad y rendimiento.
En ese sentido, existe una gama variada de camiones, mecánicos y eléctricos, que se adaptan de acuerdo a las necesidades y requerimiento de los usuarios.
Además, brindan una mayor capacidad de carga, vienen equipados con dispositivos que los hacen más versátiles y seguros para enfrentar un arduo trabajo.
De acuerdo con expertos en el rubro, se viene dando importantes saltos tecnológicos en estas unidades, como los camiones diésel-eléctrico que garantizan el máximo nivel de efectividad en costos. Estos grandes componentes resultan apropiados para los requerimientos ambientales de la minería actual.
Respecto a las capacidades de estos equipos, suelen encontrarse entre los 150, 250, 320 y 400 toneladas, siendo estas últimas las más solicitadas en el mercado nacional. Asimismo, existen camiones con sistema Trolley, que permite aumentar la velocidad en las rampas de subida, impulsando una mejora en los tiempos de ciclo y en la productividad de la operación. Además, reduce las emisiones de carbono y los costos de combustible y del mantenimiento del motor.
Con relación a los tractos y volquetes, estas unidades también cumplen una importante labor en la minería, tanto para acarrear el material con el mineral a ser procesado, así como para trasladar los concentrados de la mina al puerto. Estos componentes presentan modelos que van entre las 40 a 50 toneladas, e innovaciones que las hacen más eficientes en el transporte, ya que están provistas de motores que permiten un mayor rendimiento del combustible.
Lea el informe completo en nuestra edición 155 de Rumbo Minero
