Alegaron que la “inflación, los tipos de interés y las interrupciones en la cadena de suministro” afectan a su “viabilidad”.
Las empresas europeas Equinor y BP anunciaron este miércoles la cancelación de un contrato para vender energía eólica a Nueva York argumentando que la “inflación, los tipos de interés y las interrupciones en la cadena de suministro” afectan a su “viabilidad”.
Equinor y BP firmaron un acuerdo en 2022 para vender al estado de Nueva York la energía del proyecto eólico marítimo Empire Wind 2, que están desarrollando cerca de la región de Long Island y que tiene una capacidad potencial para generar 1.260 megavatios (MW).
Las empresas declararon que las condiciones económicas actuales hacen aquel acuerdo inviable pero aludieron a un “reinicio” en busca de “nuevas oportunidades”, dos meses después de que el estado abriera una convocatoria nueva de contratos de venta de energía.
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La nueva convocatoria, que permite a las adjudicatarias abandonar sus contratos y presentar otros con precios más altos, acepta propuestas hasta el 25 de enero, según medios locales.
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“La viabilidad comercial es fundamental para proyectos ambiciosos de este tamaño y escala”, dijo Molly Morris, la presidenta de Equinor Renewables Americas, en un comunicado.
“Este acuerdo (con las autoridades de Nueva York para cancelar el contrato) refleja unas circunstancias económicas cambiadas a escala de todo el sector y reposiciona un proyecto ya maduro para que siga desarrollándose en anticipación de nuevas oportunidades de extracción”, indica la nota, aparentemente en referencia a una nueva propuesta.
La decisión de Equinor y BP sigue a otras cancelaciones en proyectos de energía renovable en EE.UU. después de que un grupo de empresas del sector pidieran, infructuosamente, “ayuda financiera” a los reguladores para permitirles renegociar los precio de venta de energía acordados en sus contratos.
En octubre, la filial estadounidense de Iberdrola, Avangrid, canceló contratos en un gran parque eólico marino en Massachusetts (noreste de EE.UU.), y la danesa Ørsted canceló dos proyectos cerca la costa de Nueva Jersey.