La policía también tomó el control de 13 piscinas utilizadas para almacenar hidrocarburos, incautó cinco refinerías improvisadas y 17 piezas de equipo de refinación, así como 4.250 galones de hidrocarburos refinados.
Reuters.- La policía de Colombia incautó más de siete millones de galones de petróleo en redadas a refinerías ilegales en una operación dirigida a la producción de combustible de contrabando en el departamento de Norte de Santander, fronterizo con Venezuela, informó el lunes la institución armada.
El combustible se refina a partir de crudo hurtado de los oleoductos por bandas criminales y es un ingrediente clave en la producción de cocaína, o se mezcla con gasolina o diésel y se utiliza para hacer funcionar máquinas en operaciones mineras ilegales, según la policía.
«La Policía Nacional está comprometida con la salvaguarda de la naturaleza, entendiendo que es un recurso invaluable para la sociedad, y con la lucha contra el crimen organizado», dijo en el comunicado el coronel William Castaño, director de la Policía de Carabineros.
La operación se realizó en zona rural de Tibú, en el departamento de Norte de Santander, cerca de la frontera de Colombia con Venezuela.
La policía también tomó el control de 13 piscinas utilizadas para almacenar hidrocarburos, incautó cinco refinerías improvisadas y 17 piezas de equipo de refinación, así como 4.250 galones de hidrocarburos refinados, reveló el comunicado.
La producción del combustible ilegal, conocido como pategrillo, debido a su tono verdoso, es un grave problema en Colombia, donde miles de barriles de petróleo son robados a diario.
Reuters visitó refinerías ilegales en el Pacífico colombiano en 2022. En ese momento, Castaño dijo que esas refinerías contaminan un promedio de tres kilómetros cuadrados del medio ambiente circundante, citando una estimación de la policía.
El robo de combustibles, es después del narcotráfico y la minería ilegal, una de las principales fuentes de financiación de los grupos armados ilegales como las guerrillas izquierdistas y las bandas criminales que se enfrentan entre sí y con las Fuerzas del Estado en un conflicto interno de seis décadas que ha dejado más de 450.000 muertos.