En base a su estrategia en curso para centrarse en el cobre, el mineral de hierro y el proyecto de fertilizantes Woodsmith en el Reino Unido.
Anglo American acordó vender su participación minoritaria en una empresa conjunta de minería de carbón australiana por 1.600 millones de dólares australianos (US$ 1.100 millones), lo que marca un paso significativo en su estrategia en curso para centrarse en el cobre, el mineral de hierro y el proyecto de fertilizantes Woodsmith en el Reino Unido.
La compañía anunció un plan de reestructuración en mayo como parte de su exitosa respuesta a una oferta de adquisición por US$ 49 mil millones de BHP, la minera más grande del mundo. El plan se centró en desinvertir en diamantes mediante la escisión o venta de su participación del 85 % en De Beers, el mayor productor de diamantes del mundo por valor. También incluía la reestructuración de sus operaciones de platino y la venta de sus activos de carbón.
Anglo confirmó el lunes que venderá su participación del 33,3 % en Jellinbah Group a Zashvin Pty Ltd., el operador australiano de generación de energía que ya posee un tercio de la empresa, junto con Marubeni Corp de Japón. Se espera que esta transacción se cierre en el segundo trimestre de 2025.
Carbón metalúrgico
Jellinbah tiene una participación del 70 % en dos minas de carbón metalúrgico ubicadas en Queensland: Jellinbah East y Lake Vermont.
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Anglo dijo que continúa trabajando para vender su operación restante de carbón australiano, que se espera que alcance entre 4.000 y 5.000 millones de dólares, y agregó que está en conversaciones con seis compradores interesados.
Los rumores del mercado indican que entre los compradores potenciales se incluyen nombres importantes como Peabody, Yancoal y Glencore.
La venta de Jellinbah tiene como objetivo tranquilizar a los inversores sobre el compromiso de Anglo con sus objetivos de reestructuración, ya que la venta de su mina de carbón metalúrgico Grosvenor, el mayor activo de carbón de la compañía, ha sufrido retrasos debido a un incendio que afectó la operación.
Grosvenor alcanzó su primera producción en 2016, pero cerró a mediados de 2020 tras una explosión que hirió gravemente a cinco trabajadores. No volvió a producir hasta febrero de 2022.
