El acuerdo comercial requeriría la aprobación de 15 de los 27 miembros de la UE, que representan el 65% de la población de la UE, junto con una mayoría simple en el Parlamento Europeo.
Reuters.- Se espera que la Unión Europea y el bloque sudamericano del Mercosur concluyan el viernes un acuerdo de libre comercio, pero se enfrenta a una tortuosa batalla para su aprobación en Europa, dada la firme oposición francesa.
Tras más de 20 años de negociaciones y cinco años después del acuerdo inicial, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y sus homólogos del Mercosur tienen previsto anunciar un acuerdo político a las 09:30 horas (1230 GMT) en Montevideo, capital de Uruguay.
Von der Leyen voló el jueves antes de la cumbre prevista del bloque que incluye a las potencias agrícolas Brasil y Argentina, así como Uruguay y Paraguay, apenas unas horas después de que el Gobierno del presidente francés Emmanuel Macron se derrumbara.
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Francia, el país más crítico con el acuerdo en la UE, lo tachó de «inaceptable» y fuentes diplomáticas dijeron que la Comisión Europea estaba tomando un gran riesgo, con la aprobación de los miembros de la UE lejos de ser segura.
Los agricultores europeos han protestado reiteradamente contra un acuerdo UE-Mercosur que, según ellos, daría lugar a importaciones baratas de mercancías sudamericanas, sobre todo carne de vacuno, que no cumplen las normas ecológicas y de seguridad alimentaria de la UE.
Italia dijo el jueves que no había condiciones para firmar el acuerdo. Polonia afirmó la semana pasada que se oponía al acuerdo de libre comercio en su forma actual.
Los grupos ecologistas europeos también se oponen en general al acuerdo. La red Amigos de la Tierra (Friends of the Earth, en inglés) lo califica de «destructor del clima».
Por el contrario, un grupo de miembros de la UE, entre ellos Alemania y España, afirman que el acuerdo es vital para el bloque en su intento de diversificar su comercio tras el casi cierre del mercado ruso y el malestar por la dependencia de China.
Consideran que Mercosur es un mercado para los automóviles, la maquinaria y los productos químicos de la UE y una fuente potencialmente fiable de minerales esenciales, como el litio, metal de las baterías, necesario para la transición ecológica de Europa.
También apuntan a los beneficios agrícolas, ya que el acuerdo ofrece un mayor acceso y aranceles más bajos para los quesos, el jamón y el vino de la UE.
El acuerdo comercial requeriría la aprobación de 15 de los 27 miembros de la UE, que representan el 65% de la población de la UE, junto con una mayoría simple en el Parlamento Europeo.
Los negociadores sudamericanos siguen siendo optimistas en cuanto a la aprobación final de la UE y a que Francia no pueda reunir una minoría de bloqueo.