La provincia de Pataz, en La Libertad, se convirtió en un foco de inseguridad crítica debido al avance de la minería ilegal.
En menos de una semana, la Minera Poderosa sufrió un segundo atentado, esta vez con la voladura de al menos una torre de alta tensión que abastece a su planta Santa Rosa.
El atentado, perpetrado presuntamente por mineros ilegales, ocurrió pese al estado de emergencia vigente y la presencia de un contingente policial que parece no darse abasto para enfrentar las dificultades de custodiar el extenso perímetro de operaciones mineras.
«Hemos vuelto a sufrir un nuevo atentado de mineros ilegales que en esta ocasión han dinamitado… tenemos que confirmar si es una o dos torres de alta tensión. Esto evidentemente con el expreso propósito de afectar nuestras operaciones (…)”, comentó el Gerente de Asuntos Corporativos de Poderosa, Pablo De la Flor en RPP.
Torres derribadas
El ejecutivo dijo que con este nuevo atentado a Minera Poderosa ya se registran al menos dos torres derribadas en menos de tres días en pleno Estado de Emergencia y con “un importante presencia policial de casi 300 efectivos en la zona”. “Es una terrible noticia no solo para Poderosa, sino para la minería peruana”, remarcó.
Pablo de la Flor agregó sobre el contigente policial, que se ha movilizado a la zona como resultado de la declaratoria del Estado de Emergencia.
“Ellos están en las instalaciones de Hualanga, próximos a la operación. Entendemos que es difícil custodiar el perímetro, sobre todo el espacio de las torres, pero nuevamente, es una invocación para reflexionar respecto al avance tan terrible de la minería ilegal en el país”, remarcó.