«Hay que trabajar en la trazabilidad para que se sepa por dónde pasa el metal. Se tiene que fortalecer la fiscalización, mejorar la regulación, entre otras acciones», dijo.
La directora ejecutiva de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), Angela Grossheim, advirtió que la minería ilegal tiene en la mira, después del oro, al cobre, y desde ya se viene observendo principalmente alrededor del corredor minero del sur (que atraviesa Cusco, Apurímac y Arequipa).
«Entendemos que hay mineros ilegales alrededor de Las Bambas y del corredor del sur como es el caso de Apurímac. Este tipo de minería ya no es una actividad de subsistencia, sino de grandes montos de inversión», dijo en diálogo con Perú21.
Cabe precisar que, de acuerdo al último Boletín Estadístico Minero (BEM) del Ministerio de Energía y Minas (Minem), entre enero y noviembre del año pasado, la producción de este metal alcanzó los 2’472,307 de TMF, lo que significó una caída de 1.1 % si se compara con el mismo periodo del 2023.
La representante de la SNMPE consideró que Perú puede revertir las cifras y ocupar nuevamente el segundo lugar de producción, que hoy ocupa la República Democrática de El Congo.
«Estamos en un momento importante para trabajar en las fortalezas que tenemos. Tenemos exploraciones, hay que fomentar el ingreso de nuevas inversiones para asegurar la sostenibilidad de la minería cuprífera», remarcó.
Y en cuanto a la minería ilegal, «hay que trabajar en la trazabilidad para que se sepa por dónde pasa el metal. Se tiene que fortalecer la fiscalización, mejorar la regulación, entre otras acciones».
Perú21 conoció que el proyecto de oro Conga (Cajamarca), que está paralizada desde 2011, también estaría siendo víctima de mineros ilegales. Según se supo, los delincuentes ingresan al proyecto sin que las autoridades tomen acciones al respecto.