Por su parte, el economista Gonzáles Izquierdo indicó que “con los anuncios de imponer aranceles, la administración Trump apunta a reindustrializar EE.UU., y generar ingresos provenientes de las grandes corporaciones”.
La llegada de Donald Trump a la presidencia de los EE.UU. abrirá una nueva etapa en las relaciones bilaterales con ese país debido a los ajustes que está implementando en materia de comercio, inversión y cooperación económica, señaló el presidente de la Asociación de Exportadores (ADEX), Julio Pérez Alván.
En la charla ‘Oportunidades y desafíos en torno a la política económica del gobierno de EE. UU.’, organizada por la Gerencia Central de Exportaciones del gremio, instó al Ministerio de Relaciones Exteriores (RR.EE.) y al Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), a manejar este nuevo escenario de manera profesional y coordinada.
“Se debe contemplar la posibilidad de llevar a cabo acciones oportunas con otras entidades públicas y mantener informado a los exportadores en caso necesiten tomar decisiones e implementar otras estrategias en sus negocios”, manifestó.
Es importante aprovechar –añadió– todas las oportunidades que surjan de los anuncios del presidente Trump, y mantener el dinamismo de las exportaciones a ese mercado, que es un actor clave en la economía global.
“Cada decisión de EE.UU. en materia económica y comercial tiene efectos que trascienden fronteras, impactando en sectores productivos, cadenas de suministros y dinámicas comerciales a nivel mundial. El compromiso de ADEX es otorgar a las empresas las herramientas y conocimientos necesarios para afrontar un entorno global en constante transformación”, puntualizó.
Pérez Alván expresó que EE.UU. es el principal destino de la oferta no tradicional (en el 2024 concentró el 32.2% del total).
“El Acuerdo de Promoción Comercial, vigente desde el 2009, es una herramienta política comercial que convirtió a ese país en el destino de la oferta de más de 2 mil 400 empresas en su gran mayoría mipymes”, detalló.
Refirió que «si bien fuimos su principal proveedor de arándanos y el segundo en uva y palta, además de otros productos, las exportaciones peruanas representan apenas el 0.4% de su comercio con el mundo”.
Seguimiento
A su turno, la viceministra de Comercio Exterior del Mincetur, Teresa Mera Gómez, agregó que, efectivamente, se atraviesa un contexto global dinámico y desafiante por las noticias que llegan desde EE.UU., por lo cual su despacho se mantiene alerta, haciendo un seguimiento de todo lo que acontece y diseñando estrategias para minimizar cualquier impacto en el comercio peruano.
“Debemos estar preparados, actuar con visión estratégica y tomar decisiones basadas en evidencia. EE.UU. es un socio comercial clave, no podemos ignorar los desafíos presentados en las últimas semanas. Hemos sido testigos de anuncios sobre medidas comerciales que podrían tener efectos sobre nuestra canasta exportadora”, indicó.
Puntualizó que, si bien no se anunció ninguna medida específica sobre Perú, la coordinación entre sectores permitirá al país anticiparse, responder con agilidad y tomar acciones que mitiguen los efectos en la cadena exportadora, buscando preservar la estabilidad y competitividad del comercio exterior peruano.
En el evento ‘Oportunidades y desafíos en torno a la política económica del gobierno de EE. UU.’, el economista Jorge Gonzáles Izquierdo alertó de un posible escenario de ‘deglobalización’, lo que supondría un retroceso en el mundo.
“Con los anuncios de imponer aranceles, la administración Trump apunta a reindustrializar EE.UU., y generar ingresos provenientes de las grandes corporaciones”, dijo.
El dato
Deglobalización es lo opuesto a la globalización y se manifiesta en el aumento de proteccionismo (más barreras comerciales, aranceles y restricciones a la inversión extranjera), deslocalización de la producción, disminución del comercio internacional, fragmentación de las cadenas de suministro, tensiones geopolíticas y nacionalismo económico.