El mantenimiento es una práctica crucial dentro de la industria minera porque permite que los equipos trabajen adecuadamente y de forma segura, lo que conlleva a que la producción vaya al ritmo de lo planificado y se obtenga las ganancias de acuerdo a los objetivos de la empresa.
Maykol Valdez, Gerente de Ventas de Metso, indicó que por lo general las empresas mineras –dependiendo de la magnitud de la producción de la mina- invierten en mantenimiento aproximadamente entre un 12% y 15% de la inversión total para la producción del concentrado. Este monto, explicó, se destina para todas las prácticas de mantenimiento que se realizan en campo. “Lo ideal es realizar el mantenimiento de manera predictiva a fin de pronosticar fallas futuras en los equipos e intervenirlos adecuadamente en paradas programadas y no hacerlo de manera intempestiva que ocasionen pérdidas en la producción, una correcta gestión del mantenimiento con tendencia a la prevención mejora los índices de productividad, y disminuye escenarios que pongan en riesgo a las personas”, precisó.
El año pasado, comentó, Metso, con más de 30 años en el mercado peruano, tuvo el gran reto de realizar el mantenimiento programado (con parada de planta) de la unidad minera Toromocho de Chinalco, donde llevaron alrededor de 700 personas para un trabajo de 3 días. “También hemos realizado otros servicios para otras unidades en el sur del Perú con un promedio de 150 y 200 trabajadores”, mencionó.
El especialista señaló que las empresas mineras deben tener todo lo necesario para ejecutar un mantenimiento en el momento oportuno, para lograrlo se debe contar con el debido stock de repuestos, herramientas seguras, personas calificadas y una supervisión adecuada.
“Parte de nuestros desafíos es asegurar la mayor utilización del equipo a través de repuestos originales y un servicio de clase mundial; y ser un socio estratégico para anticiparnos a las necesidades del cliente de manera inmediata, no generar retrasos en los mantenimientos o en las paradas programadas dando énfasis en las áreas donde es más relevante disponer de un adecuado mantenimiento, son aquellas en las que mayor es su impacto sobre la inversión de capital y costo operacional”, añadió.
Valdez comentó que la mayoría de las empresas mineras cuentan con cierto stock en su planta, pero eventualmente el planeamiento falla, es ahí donde los proveedores tienen que mantener un stock por encima de lo recomendado para cubrir con la emergencia. “Por eso es importante trabajar con un OEM, Original Equipment Manufacturer, (fabricante original), porque no solo vendemos los repuestos y hacemos servicios, sino que también realizamos el cuidado posterior del equipo para sacarle el mayor rendimiento. Y eso es algo que nosotros llamamos análisis TCO (Total Cost of Ownership), es decir que a simple vista realizas una inversión mayor, pero en tu análisis final tienes un ahorro considerable”, dijo.
El experto reveló que entre los equipos que tienen mayor recurrencia al mantenimiento están las fajas transportadoras porque sus componentes fallan constantemente y requieren cambios. “Otro equipo son las chancadoras, semanalmente se deben realizar controles y supervisión de rutina. A los molinos se le debe medir la vibración y la temperatura para ver si algún componente se está sobrecalentando. Los motores, las bombas y las celdas de flotación también son equipos que requieren mantenimiento continuo”, indicó.
Mercado y empresa
El costo de inversión para el mantenimiento se incrementa cada año debido a que las minas buscan elevar su producción. “Es difícil ver una mina que produzca lo mismo por más de 5 años, lo que implica mayor exigencia de los equipos, o la adquisición nuevas máquinas, esto demanda una mayor integración estratégica entre el área de Producción y Mantenimiento, haciendo uso de nuevas tecnologías digitales que aseguren la continuidad del negocio de manera rentable y segura”, aseguró el experto.
De otro lado Valdez comentó que los resultados del área de servicios de Metso en la Región Andina fueron positivos. “Duplicamos nuestras ventas del 2019 respecto al 2018. Y para este 2020 esperamos un crecimiento de un 30% que nos pondría como empresa líder a nivel nacional en prestación de servicios para la minería como mano de obra”, precisó.
Innovación
Según el experto, muchas plantas concentradoras ya tienen cierto grado de automatización a través de sistemas que pueden controlar parámetros y prevenir algunos mantenimientos, sin embargo, aún la incidencia en la inversión en porcentajes es mínima.
“Hay molinos grandes, de más de 40 pies, con cierto grado de automatización y tecnología que consume menos energía. Tiene algunos elementos que reduce la inversión en el mantenimiento del molino”, indicó.
Con respecto a los tiempos, Metso utiliza una metodología que se llama SMED que consiste en hacer un análisis cronometrado de todas las actividades que involucra una parada de planta. “Hacemos el análisis, medimos, realizamos histogramas y verificamos en qué punto hay deficiencias para que, en una futura intervención, se pueda reducir el tiempo, traducidos en mayor producción”.
El representante de Metso mencionó que tienen otras tecnologías para desarrollar mantenimientos y cambios de componentes en los equipos en menos tiempo, como por ejemplo en revestimientos de molinos. “De esta manera se reduce a la mitad el tiempo del intercambio para evitar que la máquina esté parada y pueda operar la mayor cantidad de horas en el día”.
Metso brinda sus equipos y servicios a la mayoría de las empresas mineras como Chinalco, Cerro Verde, Antapaccay, Las Bambas, Antamina, Yanacocha, Gold Fields, Grupo Volcan y Grupo Nexa. “Hemos hecho servicios en Bolivia, Colombia, Guyana y Surinam”, agregó.
Según Valdez, la diferencia entre el Perú y otros países, con respecto al mantenimiento de los equipos, se basa en la cultura. “En el Perú las empresas mineras por lo general cuentan con mucho personal dedicado al mantenimiento y solo tercerizan trabajos puntuales, a diferencia de Chile, Colombia y otros países de la región, ya que generan acuerdos macros para tercerizar los trabajos de mantenimiento, enfocándose en el negocio central que es la producción del concentrado”.
El experto resaltó que están trabajando en el cambio de cultura de prevención en las minas. “La mayoría no compra mucho stock de repuestos porque no desea invertir en corto plazo. Esto puede ser perjudicial, cuando ocurra un problema y no cuenten con el stock necesario, pues se suele gastar el triple para que el material llegue de emergencia”, aconsejó.