La subsidiaria de Rio Tinto eligió a la empresa Worley como socio en su proyecto Rincón, el cual tiene como objetivo producir 60.000 toneladas de carbonato de litio al año.
Rincon Mining, una subsidiaria de Rio Tinto, ha designado a Worley como socio líder de integración y entrega (LIDP) para el proyecto de litio de potencial completo Rincón en Salar Del Rincón, provincia de Salta, Argentina.
Este proyecto, con una inversión total de US$ 2.500 millones, tiene como objetivo desarrollar una planta de carbonato de litio escalable con una capacidad de producción de 60.000 toneladas por año (tpa) de material de grado batería a partir de salmuera cruda.
Como LIDP, Worley supervisará el diseño detallado y la ejecución del proyecto, coordinándose con subcontratistas, proveedores de tecnología y contratistas de construcción.
Los servicios se prestarán a través de las oficinas de Worley en Argentina, con el apoyo de sus operaciones en Chile y Bogotá. El proyecto aprovecha la experiencia de Worley en el mercado de litio de Argentina y está catalogado por la empresa como trabajo sustentable.
Chris Ashton, director ejecutivo de Worley, afirmó: “Este resultado refuerza nuestra relación global con Rio Tinto y refleja nuestra contribución al proyecto en Argentina hasta la fecha. Esta importante expansión de la capacidad en Rincón subraya nuestro potencial como parte integral de la transición energética y demuestra nuestro compromiso permanente con la sostenibilidad”.
Diésel renovable
En un desarrollo separado, Rio Tinto ha completado lo que se dice es la primera prueba de diésel renovable en sus operaciones de mineral de hierro de Pilbara en Australia Occidental.
El ensayo, una colaboración con Neste y Viva Energy, implicó el uso de diez millones de litros de diésel renovable producido a partir de aceite de cocina usado. Mezclado con diésel fósil, el combustible impulsó una variedad de operaciones, incluidos equipos ferroviarios, marinos y mineros.
La prueba de cuatro semanas, realizada en enero y febrero de 2025, proporcionó información sobre la integración del diésel renovable y su potencial para ampliarse en las operaciones australianas de Rio Tinto.
La iniciativa resultó en una reducción de aproximadamente 27.000 toneladas de emisiones directas de gases de efecto invernadero.
Rio Tinto está explorando el uso de biocombustibles como parte de su estrategia para reducir las emisiones de alcance 1 y 2 en un 50% para 2030 y lograr cero neto para 2050.