Epcoro, la empresa estatal boliviana de comercio de oro, planea cuadruplicar sus compras este año para reforzar las reservas de oro del banco central, que enfrenta una grave crisis de liquidez.
La compañía ya ha adquirido una tonelada de oro en lo que va de año, en comparación con las 2.4 toneladas compradas durante todo 2024, según el CEO Pablo César Pérez.
“Tenemos la proyección de vender alrededor de 10 toneladas al banco central este año”, declaró Pérez en una entrevista desde La Paz. Esa cantidad representaría aproximadamente $1,000 millones a los precios actuales del oro, que han alcanzado niveles cercanos a máximos históricos debido a la inflación persistente.
Epcoro fue creada hace un año como respuesta a la crítica situación del banco central de Bolivia, que ha agotado en gran parte sus reservas de efectivo y oro para financiar los subsidios al combustible. Esta semana, el gobierno anunció que ya no podrá mantener los subsidios para todos, afectando directamente a los mineros y agricultores.
La caída de la producción de gas en Bolivia ha provocado una escasez de dólares en el mercado, lo que ha limitado las operaciones de conversión en los bancos y ha generado largas filas para comprar combustible. La inflación ha alcanzado un preocupante 13%, el nivel más alto en décadas.
Un mercado complicado para los mineros
Epcoro enfrenta el desafío de encontrar productores dispuestos a vender oro en la moneda local, el boliviano, que se ha depreciado considerablemente. Sin embargo, los mineros han aceptado estas condiciones debido a la dificultad de encontrar compradores que paguen en dólares.
Curiosamente, las exportaciones de oro de Bolivia cayeron un 72% el año pasado, totalizando solo $687 millones, a pesar del aumento en los precios internacionales. Parte de esa producción ha sido absorbida por Epcoro, aunque Pérez no reveló cifras exactas.
Pérez explicó que existe una diferencia entre el precio internacional del oro en dólares y lo que paga Epcoro en bolivianos, pero destacó que la empresa ofrece la ventaja de pagar en efectivo de manera inmediata, lo que resulta atractivo para los mineros.
El origen del oro comprado por Epcoro ha generado críticas. Algunos legisladores de la oposición han señalado que el banco central podría estar ayudando a lavar oro extraído ilegalmente de la Amazonía boliviana a través de las compras de Epcoro. Pérez ha defendido la legalidad de las operaciones, asegurando que el oro cumple con todos los requisitos legales.
Un paso hacia la estabilidad económica
Bolivia cerró el año pasado con solo $1,980 millones en reservas internacionales, de las cuales el 96% corresponde a oro. Alrededor del 13% del oro adquirido por el banco central desde mediados de 2023 hasta 2024 provino de Epcoro, según Pérez.
Aunque la empresa todavía no ha cumplido su objetivo de convertirse en el principal proveedor de oro del banco central, Pérez confía en que pronto demostrarán su capacidad para añadir valor al oro de Bolivia y fortalecer la economía nacional.