Las ampliaciones de red permitirán remplazar las bombas de agua que funcionan con gasolina por bombas eléctricas, lo que significa eliminar las emisiones de dióxido de carbono.
Los productores piscícolas del municipio de Chimoré desde hoy se benefician con el proyecto de ampliación de una red eléctrica en media tensión y baja tensión para el funcionamiento de los sistemas de bombeo eléctrico y el proyecto circuito eléctrico interno de los refugios de productores piscícolas del sector, ambos gestados en el Ministerio de Hidrocarburos y Energías.
En un acto realizado con presencia de autoridades locales y nacionales se entregó las obras concluidas, que contribuyen con el desarrollo del municipio a través del acceso a energía eléctrica en dos comunidades: “21 de Septiembre” y “Estaño Palmito”, promoviendo e incentivando el uso de energía eléctrica para usos productivos.
El Programa de Electricidad para Vivir con Dignidad (PEVD) del Viceministerio de Electricidad y Energías Alternativas, es el brazo operativo para la ejecución de los proyectos, cuya inversión ha sido posible con un crédito del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que asciende a los más de Bs 1,4 millones.
El Director General de Energías Alternativas, Alejandro Quispe, aseguró que “este proyecto beneficia a 51 familias: 31 familias productoras de la comunidad 21 de Septiembre; y 20 familias productoras de la comunidad Estaño Palmito”.
Por su parte, el Alcalde del municipio Chimoré, Melquiades Claure, agradeció “por el trabajo, por esa responsabilidad de nuestras autoridades nacionales, siempre buscando el desarrollo de nuestra comunidad. El Distrito X es pionero en la piscicultura. Esta red eléctrica y bombas eléctricas van a beneficiar en gran manera a cada productor”.
Para la extensión de la red eléctrica en ambas comunidades mencionadas, se contrató a la Empresa de Luz y Fuerza Eléctrica Cochabamba (ELFEC).
Asimismo, la empresa boliviana ChocElec se adjudicó el proyecto “Sistemas de bombeo eléctrico y circuito eléctrico interno” para refugios de productores piscícolas en las dos comunidades, que permitirá remplazar las bombas de agua que funcionaban con gasolina por bombas eléctricas, hecho que significa un ahorro económico por el desplazamiento de combustibles fósiles y reduce las emisiones de dióxido de carbono (CO2), por lo que se beneficia tanto el medio ambiente como a los productores piscícolas.