El Tribunal de Cuentas Federal autorizó continuar con los procesos de privatización de los puertos de São Sebastião (SP) e Itajaí (SC).
El Tribunal de Cuentas Federal (TCU) autorizó la continuación de los procesos de privatización de los puertos de São Sebastião (SP) e Itajaí (SC).
La agencia también dio luz verde a la Companhia Paranaense de Energia (Copel) para renovar anticipadamente la concesión de una central hidroeléctrica antes de que la empresa sea privatizada.
Puertos
En el caso de los puertos, corresponderá a la Agencia Nacional de Transporte Acuático (Antaq) preparar los avisos de subasta.
El ministro Walton Alencar, relator del caso, determinó que el producto de la venta de los puertos vaya directamente al Tesoro Nacional.
Ello, en lugar de ir a una cuenta específica destinada al reequilibrio financiero de los contratos y al pago de eventuales indemnizaciones.
Con relación al puerto de Itajaí, el ministerio ordenó al Ministerio de Puertos y Aeropuertos ya Antaq retirar del aviso público la recaudación de fondos de fiscalización.
Y así actualizar los estudios de competencia de los emprendimientos.
Alencar igualmente recomendó que el ministerio evalúe la presentación de un proyecto de ley al Congreso.
Según la Agencia Brasil, esto sería para que los valores obtenidos con las privatizaciones se conviertan en inversiones en los propios proyectos.
Cabe indicar que desde diciembre de 2021, el Puerto de São Sebastião forma parte del Programa Nacional de Privatización (PND).
Mientras que el puerto de Itajaí fue calificado para el Programa de Sociedades de Inversión (PPI) en junio de 2020.
Asimismo, la autorización del TCU deja la decisión sobre las privatizaciones al Ministerio de Puertos y Aeropuertos, que informó que no pretende proceder con las ventas en este gobierno.
Hidroeléctrica
El TCU también aprobó que Copel acelere la renovación de la concesión de la hidroeléctrica de Foz do Areia antes de que sea privatizada.
Originalmente, la concesión expiraría en 2024.
Pero Copel, empresa eléctrica estatal de Paraná, acordó con el Ministerio de Minas y Energía en octubre del año pasado adelantar la renovación de la concesión, pagando un bono hasta diciembre de este año.
La anticipación permite que la planta permanezca bajo el control de Copel después de la privatización, en lugar de revertir la concesión a la Unión.
En noviembre del año pasado, la Asamblea Legislativa de Paraná aprobó la privatización de Copel que permite al gobierno estatal tener poder de veto en las decisiones de la empresa.
Un dato
A la fecha, el Tribunal de Cuentas de Paraná está analizando el modelo de privatización.