Durante mayo se concretaron una serie de tareas en los diferentes sectores de la construcción, y se estima que esté terminada durante 2027.
Una tronadura en el lugar donde se ubicará la nueva planta concentradora de Minera Centinela marcó el inicio de las obras mayores que darán vida a Nueva Centinela, la mayor inversión minera en Chile durante los últimos cinco años y que Antofagasta Minerals decidió impulsar en la comuna de Sierra Gorda, ubicada en la Región de Antofagasta.
Durante mayo se concretaron una serie de tareas en los diferentes sectores de la construcción, para iniciar a las obras definitivas y concretar el avance físico de esta inversión que estará terminada durante 2027. En la actualidad, el proyecto presenta más de un 14 % de progreso, lo que se ajusta a lo planificado.
“Nueva Centinela representa la confianza que tiene el Grupo Minero en el cobre como un material fundamental para la transición energética mundial, donde Chile está llamado a ser un país protagonista. El proyecto ya está impulsando el empleo regional y el desarrollo de proveedores locales, lo que es fundamental para esta inversión sea un aporte relevante a la región y a sus habitantes”, manifestó el presidente ejecutivo de Antofagasta Minerals, Iván Arriagada.
Relaves espesados
En las últimas semanas también comenzaron los primeros movimientos de material en el área donde se ubicará el nuevo Depósito de Relaves Espesados (DRE), tecnología sustentable que minimiza el requerimiento de agua fresca y maximiza su recuperación. Minera Centinela la utiliza desde los inicios de su operación y será replicada en Nueva Centinela.
El proyecto también considera la ampliación de la capacidad de la actual planta de molibdeno de Minera Centinela, así como un nuevo desarrollo del rajo Esperanza Sur, con el ingreso de nuevos camiones autónomos. A inicios de junio finalizó el montaje de dos camiones de extracción Komatsu 980 E-5, los primeros de 11 unidades que considera la operación.
Nueva Centinela incorporará tecnologías de avanzada en eficiencia y precisión, como chancadores HPGR (High Pressure Grinding Rolls) que funcionan con rodillos de gran tamaño, sistema que permitirá optimizar el proceso de molienda y reducir el consumo de energía, sobre todo al tratar mineral de mayor dureza. Así también, considera una correa overland de bajo roce de más de 6 kilómetros de extensión para conectar el área de chancado y la planta concentradora.