Un mal liderazgo afecta la productividad de los colaboradores.
Al menos cinco de cada 10 colaboradores de una empresa piensan renunciar a su puesto de trabajo debido a la mala relación que tienen con sus jefes, según el último reporte del portal de empleos Bumeran.
Para Ada Kanashiro, directora de Educación Continua y Postgrado de la Universidad de Ciencias y Artes de América Latina (UCAL), esta cifra debe ser un llamado de atención para los altos ejecutivos porque evidencia que necesitan desarrollar habilidades de liderazgo.
“Evidentemente, no todos los jefes son buenos líderes. Y, en definitiva, un mal liderazgo tiene un impacto negativo en la salud emocional del equipo, en su compromiso con la compañía y, como si fuera poco, también en su productividad”, explicó Kanashiro.
Además, para revertir esta situación, recomendó a los ejecutivos desarrollar su liderazgo y fortalecer sus habilidades blandas, a través de programas de coaching profesional.
En ese mismo sentido, la especialista de UCAL brindó cinco consejos de coaching para ejercer un liderazgo efectivo en las empresas:
- Autoconocimiento: El primer paso para liderar eficazmente a los demás es conocerte a ti mismo. Dedica tiempo a reflexionar sobre tus fortalezas y debilidades, tus valores y tus metas profesionales. Aprende a reconocer tus patrones de comportamiento y a comprender cómo pueden afectar tu liderazgo.
- Desarrollo de habilidades: Identifica las habilidades y competencias que necesitas desarrollar para ser un líder efectivo en tu campo. Dedica tiempo y energía a desarrollar soft skills como empatía, resiliencia, resolución de problemas, asertividad, entre otros. Puede potenciar estas habilidades a través de cursos de coaching, talleres o mentorías.
- Comunicación efectiva: La comunicación es una habilidad esencial para un liderazgo efectivo. Aprende a comunicarte de manera clara y efectiva, tanto de manera verbal como no verbal. Asegúrate de escuchar activamente a los demás y de transmitir tus ideas y expectativas de manera asertiva y eficiente.
- Orientación al desarrollo: Los colaboradores necesitan el reconocimiento y respaldo de sus líderes. Por tanto, ayuda a los miembros de tu equipo a desarrollar sus habilidades y a crecer profesionalmente. Asegúrate de que cada miembro tenga las herramientas y el apoyo necesarios para alcanzar sus objetivos.
- Enfoque en resultados: Un buen líder se enfoca en lograr resultados y en llevar a cabo proyectos exitosos. Trabaja de la mano con tu equipo para establecer metas claras y alcanzables, y asegúrate de que cada miembro tenga un papel claro en la consecución de estas metas.
Finalmente Kanashiro apuntó que los colaboradores se inspirarán y trabajarán mejor si ven que su líder está comprometido con los mismos valores y expectativas que se espera de ellos.
“Todas las personas podemos desarrollar habilidades de liderazgo y convertirnos en mentores de nuestros equipos. Pero, para lograrlo necesitamos capacitarnos en programas de Coaching Ejecutivo y Coaching Profesional como los que ofrece UCAL», dijo.
«De eso depende la satisfacción, el bienestar y la performance de los colaboradores”, finalizó.