En minería, aportar soluciones sostenibles a la escasez de recursos hídricos y a la protección del medioambiente es vital, ya sea a través de plantas de tratamiento de agua o de desalación, entre otras soluciones.
En este sentido, el reúso de agua es importante pues implica un impacto positivo en diferentes aspectos, desde el económico y social hasta el ambiental. Sumado a ello, la mayor disponibilidad de agua y la mayor presión por evitar el uso de la misma a nivel subterráneo obligan, principalmente por la viabilidad de la mina y posibles expansiones, a tratarla al máximo para reúso o para devolverla al medio natural. Esto hoy en día se entiende como economía circular, que para este caso implica cerrar el círculo de la captación de recursos hídricos con la reutilización de los mismos.
Hazem Fayad, gerente comercial de Abengoa en Perú, explicó que la firma ha acometido toda una suerte de instalaciones de tratamiento de efluentes, de potabilización y de desalación, principalmente con tecnología de ósmosis inversa, en todo el mundo. Concretamente en desalación, Abengoa es una empresa líder en el mercado internacional, y cuenta con una capacidad instalada de 1,7 millones de m3/ día, que se ampliará hasta los 4,3 millones cuando se complete el porfolio que la multinacional actualmente tiene en ejecución.
Si bien por un lado muchas compañías mineras disponen de un recurso ilimitado de agua de calidad para sus procesos de separación/obtención del mineral, pero se encuentran con graves problemas para la devolución de esos caudales al medio natural por la presencia de contaminantes, por otro, existen explotaciones mineras que no disponen de dichos recursos y necesitan apoyarse en la desalación de agua de mar y/o en la adecuación de agua de pozos salobres o similar mediante tecnologías de membranas de ósmosis de última generación que permiten lograr estos hitos con un muy reducido consumo energético.
Sí, los voceros de Abengoa destacan la importancia de las plantas desalinizadoras para el sector minero como una de las soluciones que permitirá el mantenimiento y la expansión de la actividad minera.
“La distancia a la costa y altura sobre el nivel del mar son factores muy importantes a tener en cuenta para estudiar la viabilidad. No obstante, el beneficio (ambiental, social, económico) en las minas en Chile está viabilizando proyectos a largas distancias y a alturas de más de 3.000 msnm.”, indicaron.
Y es que, la experiencia mundial explica que hay procesos mineros que pueden usar directamente agua de mar, sin desalar; y una vez desalada, puede ser usada como cualquier otra fuente de agua continental.
“En el Perú podemos destacar tres proyectos mineros en operación que emplean la desalación del agua de mar por medio de ósmosis inversa: Proyecto polimetálico de Cerro Lindo (Nexa), proyecto de fosfatos Miski Mayo (Moisac) y proyecto de ampliación de planta de Shougang Hierro Perú”, precisaron los expertos de Abengoa.
Por su parte, Ramón Rubio Vicente, director de Desarrollo de Negocio América de la Vertical de Agua y Energía de Abengoa, dijo para el caso de problemas para la devolución de caudales al medio natural por la presencia de contaminantes, que tecnologías como la oxidación avanzada y tratamientos biológicos con membranas permiten reducir y/o eliminar dichos contaminantes.
Sin embargo, no es la única alternativa, pues, según refirió, en la actualidad, el concepto ZLD (Zero Liquid Discharge ó Vertido Líquido Cero en español) aparece como la alternativa a usar. Este concepto implica una combinación de procesos que son técnicamente viables y su aplicación dependerá de su viabilidad económica en cada caso.
“Por nuestra parte, somos una empresa que integra las tecnologías y productos que mejor se ajustan a cada necesidad, dando servicio de EPC (Engineering, Procurement and Construction), de O&M (operación y mantenimiento), tratamientos biológicos (aerobios y anaerobios) y fisicoquímicos (flotación, filtración, decantación, espesamiento, deshidratación…), los cuales forman parte de los procesos que proyectamos, construimos y operamos. Asimismo, tenemos procesos de afino mediante intercambio iónico y/o membranas de tipos varios (RO, EDR/ ED, EDI, etc.) y procesos de elevada recuperación para las aguas de alta calidad”, detalló.
Desalación de circuito cerrado
Consultado sobre ¿qué nuevos procesos ha incorporado Abengoa en su portafolio? Hazem Fayad dijo que, dentro de los procesos de membrana, pueden destacar las de alta recuperación mediante CCD (desalación en circuito cerrado) y la destilación por membranas.
“Uno de nuestros puntos más fuertes es la optimización energética de los procesos, lo que ha hecho que estemos trabajando en las tres plantas desaladoras más grandes del mundo en este momento”, reveló el Gerente Comercial de Abengoa, firma con más de 75 años de experiencia.
Por otro lado, Ramón Rubio Vicente señaló que los tratamientos de agua para reúso son muy específicos en función del tipo de minerales y procesos que se maneja en cada mina.
“En general, la combinación de los tratamientos físico-químico convencionales con las más avanzadas tecnologías de membranas (UF/MBR, RO, EDR/ED, etc.) proporcionan un abanico de soluciones de recuperación amplísimo para el sector de la minería”, detalló Rubio Vicente.
Máximo desempeño
El experto comercial de Abengoa también resaltó que el objetivo de los procesos de reúso es alcanzar el mayor porcentaje de recuperación posible, pudiendo llegar a garantizar el vertido nulo como en el caso de los ZLD, con valores cercanos al 95- 97% de recuperación.
“Sin embargo, siempre hay un pequeño porcentaje de humedad que se libera en el propio proceso, bien por evaporación al ambiente, por humedad contenida en el lodo o sales finales del proceso, o simplemente porque ese último escalón para alcanzar el 100% representa un costo económico de inversión y operación que no justifica el fin”, recalcó.
Finalmente, desde Abengoa especificaron que las tecnologías de tratamiento de agua vienen evolucionando de forma autónoma en el mundo. El sector minero se está viendo beneficiado por el avance en los procesos, costes, etc. y le abre la puerta a su implementación masiva, sobre todo en un momento de déficit hídrico que obliga a realizar planteamientos innovadores para dar solución a la actividad minera, medioambiente, entre otros.