Entrevista a Gianflavio Carozzi Keller, CEO en AESA Infraestructura y Minería
¿Cómo afectó la pandemia Covid 19 a AESA, y cómo viene superando esta crisis?
Nos impactó en una reducción significativa pero temporal de los ingresos y la necesidad de implementar el trabajo remoto de forma inmediata, pero estuvimos preparados para ello. Inicialmente, nos enfocamos en la salud y seguridad de nuestra fuerza laboral, desmovilizamos a más de 1,500 empleados de los proyectos donde operamos y nos aseguramos de que llegaran a casa a salvo. Incrementamos las campañas de salud y realizamos monitoreos para garantizar la seguridad de nuestra fuerza laboral. Tomamos medidas para garantizar la salud financiera de la empresa para preservar el efectivo y, lo que es más importante, el empleo, así como el apoyo a nuestra base de proveedores de la comunidad local, y reforzamos nuestros esfuerzos de comunicación para mantener a nuestra fuerza laboral bien informada. Como tal, nos posicionamos bien para resistir esta tormenta.
Para el reinicio de las operaciones, desarrollamos todos los protocolos de seguridad y salud necesarios. Retomamos las actividades en estrecha coordinación con nuestros clientes, implementamos medidas que aseguraban que nuestra fuerza laboral no se infecte y evitar que el virus ingrese a nuestras operaciones; también desarrollamos planes de reacción en caso de presentar síntomas. Ahora estamos trabajando en lo que será la nueva norma de operaciones en el futuro y en el fortalecimiento de ciertos procesos claves y estar bien preparados para aprovechar las oportunidades que estarán disponibles”.
¿Cómo afectará la pandemia del Coronavirus a la industria minera en su conjunto?
La pandemia de coronavirus está causando un impacto significativo y permanente en la industria minera. Está cambiando la forma en que operamos e interactuamos; está cambiando los protocolos actuales de salud y seguridad para preservar el distanciamiento social, y está cambiando la forma en que trabajamos con el personal. Pero también nos presenta oportunidades para introducir cambios a un ritmo más rápido, ya que ha derribado paradigmas como el trabajo remoto y el uso de la tecnología para hacer frente a la crisis.
A medida que el distanciamiento social se convierta en una necesidad, veremos un mayor impulso para la automatización y el funcionamiento a distancia. Todos estos cambios inmediatos generan un costo adicional en un principio, lo que genera la necesidad de aumentar la productividad para mitigarlo. Por lo tanto, los cambios que se habían dejado de lado o rechazados en el pasado encontrarán un viento de cola significativo para ser revisado e implementado. Estamos trabajando en los cambios necesarios para salir fortalecidos de esta crisis y beneficiar a nuestros clientes.
En AESA, Yo te cuido y tú me cuidas!