EMPRESA. Graña y Montero informó que su subsidiaria Vial y Vives – DSD S.A. ha sido adjudicada por la compañía minera Teck Quebrada Blanca S.A. (“Teck”) con un contrato para ejecutar los trabajos de obras civiles y montaje electromecánico del área de Molienda y Chancado de Pebbles de la Planta Concentradora para el proyecto Quebrada Blanca Fase 2 de Teck.
“El proyecto Quebrada Blanca Fase 2 (QB2) es una expansión de la operación cuprífera de Quebrada Blanca de Teck, en la región de Tarapacá, Chile”, señaló Luis Francisco Diaz Olivero, gerente general corporativo de Graña y Montero, en una carta enviada a la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV), y difundida por el Diario El Comercio.
El ejecutivo indicó que este proyecto incluye la construcción de una planta concentradora de 143.000 toneladas diarias e instalaciones relacionadas, las cuales están conectadas a un nuevo puerto y a una planta de desalinización mediante una tubería de agua desalinizada de 165 kilómetros de longitud.
Graña y Montero señaló que la contraprestación aproximada por los trabajos antes señalados se encuentra en el rango de los US$250 millones, pagaderos a la verificación de distintos hitos habituales en este tipo de trabajos. “El plazo para la realización de los trabajos es de aproximadamente 28 meses contados a partir de la orden de proceder del contrato respectivo”, subrayó.
En esa línea, Luis Francisco Diaz mencionó que la producción anual promedio de cobre durante los primos cinco años completos de operación se estima en 316.000 toneladas. “QB2 también incluirá el primer uso a gran escala de agua de mar desalinizada en la región de Tarapacá”, agregó.
Para Diaz, la suscripción del referido contrato de obra refleja el avance de la estrategia regional del Grupo y fortalece el posicionamiento de nuestro negocio de construcción en el mercado minero.
“La compañía siguió un estricto proceso de debida diligencia, gestionado por Bechtel Chile, Ltda., de acuerdo con los más altos estándares internacionales”, subrayó el ejecutivo.