De acuerdo a Pluz Energía, este tipo de consumos mínimos pueden representar entre el 5% y 10% del total del recibo de electricidad.
Este 21 de octubre se conmemora el Día Mundial del Ahorro de Energía, una oportunidad para reflexionar sobre los hábitos diarios de nuestros consumos eléctricos y la promoción de la eficiencia energética. En ese sentido, los expertos de Pluz Energía brindan recomendaciones para evitar los tan temidos “consumos fantasmas”, consumos que muchas veces realizamos de manera inconsciente y que pueden perjudicar nuestra facturación mes a mes.
¿Cómo identificar un consumo fantasma?
Un “consumo fantasma” es el consumo eléctrico que persiste incluso cuando los aparatos están aparentemente apagados. Se produce cuando un dispositivo eléctrico está apagado pero conectado a la corriente eléctrica, lo que significa que aún consume una pequeña cantidad de electricidad. Este tipo de consumos mínimos puede llegar a representar entre el 5% y el 10% del total en el recibo de luz, generando un gasto innecesario a muchas familias. Además, que contribuye al aumento de la huella de carbono, afectando al medio ambiente.
“El ahorro energético no es solo una cuestión económica, sino una responsabilidad ambiental que todos debemos asumir. Con pequeñas acciones, como el uso de electrodomésticos eficientes, la desconexión de aparatos o dispositivos, la optimización de la iluminación y el cambio de hábitos cotidianos, podemos lograr un impacto significativo en la reducción del consumo de energía”, señaló Carlos Colomer, especialista de Pluz Energía.
¿Qué dispositivos provocan un “consumo fantasma”?
Entre los dispositivos que generan mayor “consumo fantasma” se encuentran aquellos en modo de espera, como televisores, equipos de sonido, cargadores, computadoras y consolas de videojuegos. Si solo se “apagan”, pero no se desconectan de la alimentación de la corriente eléctrica, seguirán consumiendo energía para responder rápidamente.
Recomendaciones clave para evitar los “consumos fantasmas”
El especialista de Pluz Energía comparte cuatro claves fundamentales para reducir el «consumo fantasma» en los hogares:
- Desconectar los aparatos: La medida más efectiva para eliminar el “consumo fantasma” es desconectar completamente los aparatos de la corriente cuando no se están utilizando. Aunque algunos dispositivos continúan consumiendo energía en modo de espera, desenchufarlos por completo garantiza que no utilicen electricidad innecesaria.
- Utilizar regletas con interruptor: Si utiliza regletas, elija las que tienen interruptor ya que permiten cortar la alimentación de varios dispositivos al mismo tiempo con un solo botón. Esta solución es especialmente útil para áreas con múltiples aparatos conectados, como centros de entretenimiento o espacios de trabajo, y simplifica la tarea de desconectarlos.
- Priorizar los modelos eficientes: Al comprar nuevos aparatos, es recomendable optar por aquellos que cuenten con certificación energética, como la etiqueta Energy Star. Estos dispositivos están diseñados para consumir menos electricidad tanto en uso como en modo de espera, lo que se traduce en ahorro a largo plazo y menor impacto ambiental.
- Apagar o cubrir las luces piloto: Las luces piloto, presentes en muchos aparatos para indicar si están en modo de espera o apagados, también consumen energía. Si es posible, es recomendable apagar estas luces para minimizar el consumo eléctrico continuo, especialmente en aparatos que no necesitan una señal visual constante.
Estas medidas no solo ayudan a reducir el consumo eléctrico y los costos en el hogar, sino que también contribuyen a disminuir la huella de carbono, apoyando un estilo de vida más sostenible.