La producción de cobre refinado en China creció un 2,8% interanual en los dos primeros meses de 2020, mostraron datos oficiales el martes, pero la tasa diaria cayó más de un 15% comparado con diciembre, ya que las fundiciones redujeron sus cargamentos por el brote de coronavirus.
China, el mayor consumidor mundial de cobre, fundió 1,527 millones de toneladas del metal en enero y febrero combinados, según la Oficina Nacional de Estadísticas.
La agencia no suele reportar cifras mensuales individuales para enero y febrero por las distorsiones que genera la festividad del Ano Nuevo Lunar, que se extendió este año en un intento por frenar la propagación del virus.
Según cálculos de Reuters, la tasa de producción fue de 25.450 toneladas de cobre refinado al día, un 15,2% menos que el récord mensual de 30.000 toneladas de diciembre, y su tasa diaria más baja desde mayo de 2019.
El virus, que se originó en la provincia china de Hubei, provocó temores sobre la demanda de cobre, pero el principal problema para las fundiciones fue la imposibilidad de liquidar los crecientes inventarios del ácido sulfúrico derivado, lo que les dejó con poco espacio de almacenamiento.
“Hubei es la principal zona productora de fertilizante de fosfato en China, con cerca de un tercio de la producción total”, dijo Xiaoxiong He, director asociado de IHS Markit, en un correo electrónico.
“Debido al COVID-19, el transporte (…) ha sido difícil, aumentando los inventarios de ácido sulfúrico”, agregó, refiriéndose a la enfermedad causada por el virus.
Según He, las fundiciones lo están sobrellevando reduciendo los cargamentos de producción en el corto plazo. “No obstante, el transporte está mejorando gradualmente y las compañías de fertilizante de fosfato se están reactivando de manera gradual, lo que podría resolver la situación”.