Pérdidas por paralización de transporte de crudo por el Oleoducto Norperuano alcanzan los 3 millones de dólares.
Alrededor de 150 personas mantienen aún tomadas las instalaciones de la Estación 5 del Oleoducto Norperuano (ONP), en Manseriche, provincia del Datem del Marañón, Loreto, exigiendo solución a una serie de demandas sociales al Estado.
Ante ello, PETROPERÚ exhortó a los representantes de las federaciones que promueven estas acciones a realizar sus reclamos de manera pacífica, a través del diálogo con las instituciones de Gobierno, manteniendo la paz social, evitando acciones violentas que pongan en riesgo su vida y que continúen paralizando la industria de hidrocarburos.
Como se sabe, la medida de fuerza -adoptada el 4 de octubre pasado- es promovida por la Federación Nativa Awajún Río Apaga (Fenara) y los Pueblos Afectados por la Actividad Petrolera (PAAP), en demanda de una serie de proyectos vinculados a servicios básicos.
En el marco del Estado de Derecho y el respeto a las normas, solo a través del diálogo es posible llegar a acuerdos para solucionar los problemas que aquejan a las comunidades, de ahí que PETROPERÚ insista en llamar a la ponderación para evitar poner en riesgo la vida de las personas y la actividad petrolera en nuestra Amazonía; más aun teniendo en cuenta que la Estación 5 y las demás estaciones del Oleoducto Norperuano son un soporte básico para las inversiones y operaciones de las empresas petroleras, las cuales benefician a miles de personas, generando trabajo de manera directa e indirecta.
Asimismo, la empresa estatal ha alertado a las autoridades del peligro que supone que las personas, al interior de las instalaciones, estén preparando sus alimentos sin considerar el grave riesgo que ello supone, pues solo una chispa podría originar un incendio. Además, cualquier fuente de encendido, como fogatas o incluso el uso de teléfonos celulares, podría desencadenar incendios y explosiones con terribles consecuencias.
Debido a esta medida de fuerza, PETROPERÚ está impedida de tener el control de las instalaciones, situación que le imposibilita ejecutar cualquier acción operativa, así como atender emergencias en caso se presente una contingencia o accidente, originazada por actividades inseguras de los ocupantes.
Cabe señalar que el personal de las Estaciones Andoas y Morona, ubicadas en el Ramal Norte del ONP -así como los trabajadores de las Estaciones 5 y 6- fueron oportunamente evacuados, en salvaguarda de su integridad física.
Al momento, son 27 días en que el servicio de transporte de crudo por el ONP se encuentra paralizado, generando una pérdida que bordea los 3 millones de dólares. Asimismo, tenemos en la Estación 1, más de 400 mil barriles de crudo en los tanques de almacenamiento, esperando ser transportados y 130 mil barriles de crudo, inmovilizados en barcazas flotantes en el río Marañón; situación de alto riesgo desde el punto de vista de la seguridad de las poblaciones vecinas, instalaciones y el ambiente.
Una vez más, PETROPERÚ invoca a los representantes de las mencionadas federaciones a deponer su medida de fuerza, a abandonar las instalaciones y realizar sus reclamos de manera pacífica, evitando estas acciones que ponen en riesgo sus vidas.