Informe elaborado por el IPE revela que los peruanos han pagado más de S/ 32 mil millones en subsidios y programas para mitigar el impacto de la dependencia de nuestro país a los combustibles importados.
La Sociedad Peruana de Hidrocarburos (SPH) reveló que el costo fiscal acumulado de los subsidios, exoneraciones y programas destinados a mitigar la dependencia de combustibles importados en las últimas dos décadas ha superado los S/ 32 mil millones, principalmente del Fondo para la Estabilización de Precios de Combustibles (FEPC), que se estima ha costado más de S/ 18 mil millones.
El monto total, señala el estudio “Mercado energético en el país: barreras y oportunidades”, elaborado por el Instituto Peruano de Economía (IPE) en colaboración con la consultora LQG, habría permitido inversiones significativas para fortalecer la infraestructura energética del Perú, como, por ejemplo, la construcción de cerca de 3,000 km de ductos de gas natural, equivalente a cinco veces la distancia del actual ducto que conecta Cusco con Pisco.
Asimismo, estos recursos habrían financiado el despliegue de más de 143 mil km de redes de distribución de gas natural, once veces la extensión de las redes actuales en Lima y Callao; o la conversión de 6.8 millones de vehículos a GNV, 51 veces más que las conversiones logradas por el programa Ahorro GNV; o la conexión de 3.9 veces el número de hogares pendientes de redes de gas natural, lo que equivale a 14 veces las conexiones alcanzadas entre 2016 y 2024.
Llamado a la acción
Al respecto, el presidente de la SPH, Felipe Cantuarias, remarcó que el estudio pone en evidencia la urgencia de invertir en el desarrollo de infraestructura energética local, particularmente en la masificación del gas natural, como una alternativa sostenible y económicamente eficiente.
“Instamos a las autoridades a priorizar políticas públicas que fomenten la inversión en el sector hidrocarburos, lo que no solo fortalecería la seguridad energética, sino también reduciría la exposición del país a las fluctuaciones de los mercados internacionales de crudo”, apuntó.
El estudio menciona que, a pesar de la diversificación en la matriz de combustibles, la dependencia del Perú a las importaciones para satisfacer la demanda interna ha persistido. Así, en 2023, el 75% de la demanda de diésel se cubrió con importaciones (más de 2 veces la participación en 2003: 33%), mientras que en gasolinas la dependencia externa llegó a 52% (13 veces la participación en 2003: 4%).
Ahorro para todos
El informe también destaca que en un contexto de masificación del gas natural se generarían ahorros anuales de cerca de S/ 1,500 millones, cifra que podría financiar 136 km de ductos de transporte de gas natural o 6,557 km de redes de distribución. Dichos recursos también podrían usarse para la conversión a GNV de 315 mil unidades o para conectar con gas natural a 996 mil hogares.
El estudio plantea una serie de recomendaciones de política, como la necesidad de eliminar las barreras para la inversión y exploración de proyectos energéticos; la eliminación de la devolución de impuestos a los combustibles; sustituir progresivamente el FEPC por programas focalizados; y el aprovechamiento de fuentes de energía más eficientes.
Compromiso
La SPH reafirma su compromiso con el desarrollo de una industria energética moderna, competitiva y sostenible, alineada con los objetivos de crecimiento económico del Perú y las necesidades de los peruanos. Este tipo de inversión permitiría una transición ordenada hacia energías más limpias, maximizando el impacto positivo en la calidad de vida de las personas.