La china Sinomine Resource estaría en conversaciones sobre proyectos de litio en Sudamérica y busca oportunidades en África.
En el 2023 es posible que el litio sea menos costoso y de ocurrir, daría cierto alivio a los fabricantes de vehículos eléctricos presionados por los costos altísimos.
Así estimó, según Bloomberg, Wang Pingwei, presidente de la empresa minera Sinomine Resource Group.
Para el directivo, los precios ya se han suavizado después de un espectacular repunte de dos años calificado.
Y por ello, consideró que el enfriamiento está a punto de continuar a medida que surja más oferta para recortar márgenes anormalmente altos para los productores de litio.
“Creemos que la tendencia gradual a la baja del litio continuará el próximo año”, dijo Wang, pronosticando una caída de alrededor de una cuarta parte de los niveles actuales.
“Los precios no caerán por un precipicio ya que el mercado permanece ajustado”, declaró Wang, cuya compañía opera minas en Zimbabue y Canadá.
Situación del precio
El aumento implacable del litio desde 2020 ha perjudicado a los compradores y ha contribuido al primer aumento anual en los costos de las baterías desde que BloombergNEF comenzó a monitorearlos hace casi una década.
Además, los precios de referencia en China siguen siendo aproximadamente el doble que a principios de 2022.
Ello pese a disminuir este mes, ya que la demanda del sector de vehículos eléctricos en rápida expansión supera la oferta.
Frente a ello, Wang de Sinomine prevé que los precios del carbonato de litio se desplacen a unos 400,000 yuanes por tonelada en 2023.
Eso se compara con los 527,500 yuanes actuales y un récord de casi 600,000 yuanes a mediados de noviembre.
Más enfoques
Para Stella Li, vicepresidenta ejecutiva de BYD, una mayor oferta minera empujará al mercado a un superávit el próximo año y ayudará a suavizar los precios
Incluso, la retirada de créditos para vehículos eléctricos de China, así como las incertidumbres sobre la pandemia y la economía mundial, también están afectando las perspectivas.
Para Alice Yu, analista senior de S&P Global Market Intelligence, en los próximos seis meses se podría dar una debilidad de la demanda.
Añadió que esa situación podría dominar las discusiones sobre el precio del litio.
“Ya que la demanda en China se ve desafiada por la reducción a cero de los subsidios y el aumento de los casos DE COVID-19”, indicó.
“Los consumidores en Occidente enfrentan crecientes problemas de asequibilidad”, resaltó.
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Planes sobre litio
Sinomine quiere expandir la producción en todo el mundo, justo cuando aumentan las tensiones geopolíticas con EE. UU., Canadá y otros países que se mueven para restringir el papel de China en la cadena de suministro de vehículos eléctricos.
La firma Wang fue una de las tres empresas chinas a las que Canadá ordenó vender participaciones en empresas que cotizan en Canadá bajo reglas más estrictas para la inversión extranjera.
Por separado, todavía posee la mina Tanco en Canadá, así como el sitio de litio Bikita en Zimbabue.
“Nuestra confianza para invertir en más minas en América del Norte es relativamente baja en este momento”, dijo Wang.
La compañía se encuentra actualmente en conversaciones sobre posibles proyectos en Sudamérica y seguirá buscando oportunidades en África.
“En África desarrollar minas es más fácil que en otras jurisdicciones. Asia central es otra perspectiva, incluido Afganistán una vez que la situación de seguridad mejore”, sostuvo.
Un dato
Sinomine tiene actualmente una capacidad de producción anual de 25,000 toneladas de hidróxido y carbonato de litio para baterías.
La compañía espera aumentar a 60,000 toneladas el próximo año y tiene como objetivo una capacidad de 100,000 toneladas para 2025.