INTERNACIONAL. La creciente demanda de baterías de litio para alimentar vehículos eléctricos ha convertido este elemento químico en una importante fuente de ingresos para sus principales productores. Chile, que posee una de las mayores reservas de litio del mundo, no quiere ser solo un gran exportador de este material sino que aspira a instalar en su territorio los principales centros de fabricación de baterías para vehículos eléctricos. Así lo informó el portal web hibridosyelectricos.com
Argentina, Bolivia, Perú y Chile tienen el 85% de reservas de litio del planeta, en el área que se conoce como el “triángulo del litio”, formado por el Salar de Atacama en Chile, el Salar del Hombre Muerto en Argentina y el Salar de Uyuni en Bolivia. Chile es el segundo productor mundial, con el 22% de las reservas globales de litio, lo que supone una importante fuente de ingresos para el país. Hasta ahora, solo ha podido exportar el mineral en bruto a países como China o Corea del Sur, donde se fabrican la mayoría de las baterías. Pero durante los últimos dos años, el gobierno ha estado tratando de alentar a los fabricantes a refinar y procesar litio en Chile.
En 2017 y 2018, la agencia gubernamental de desarrollo de Chile, Corfo, firmo un acuerdo con la principal minera de Chile Albermale, para ofrecer el litio a un precio más barato a las empresas que transforman el litio en Chile. Los ganadores de la primera subasta para comprar este litio, anunciados hace medio año, fueron el consorcio entre el fabricante coreano de baterías Samsung SDI y POSCO y el grupo industrial Fulin Sichuan de China. Un desacuerdo entre Corfo y Albemarle sobre los términos del contrato detuvo el proceso. Ahora que las dos partes han acordado una fórmula para calcular el precio preferencial y la minera negociará los términos exactos de la venta de litio con cada compañía.
Según Sebastián Sichel, vicepresidente ejecutivo de Corfo, se espera que la construcción de las plantas de refinería de litio dure aproximadamente un año. Según Sichel, invertirán más de 750 millones de dólares en instalaciones para transformar las sales de litio —carbonato de litio e hidróxido de litio— en cátodos para baterías de vehículos eléctricos.
En una reciente entrevista, Sichel explicó las intenciones del gobierno respecto a esta estrategia. “Queremos que los fabricantes produzcan parte de las baterías en nuestro territorio. No sabemos si alguna vez fabricaremos los vehículos, pero nos gustaría ver al menos partes de la batería producidas en Chile, o, tal vez, toda la batería», ha afirmado. Actualmente, la mayoría de las instalaciones de fabricación de baterías se encuentran en Asia.
Ahora, Corfo ha firmado nuevos contratos con las empresas mineras más importantes que operan en las salinas del desierto de Atacama, Albemarle y Soc. Química y Minera de Chile, conocida como SQM, en el que se comprometen a vender el 25% de su producción a un precio preferencial. La segunda subasta quedará abierta a finales de marzo para la recepción de las ofertas de las empresas interesadas en comprar el 25% de la producción de SQM. Los ganadores del proceso se anunciarán a finales de año.
En esta segunda oportunidad, “nos han contactado empresas de muchos países, como Italia, Francia, Australia, Alemania y Japón», dijo Sichel. «Está claro que Chile está haciendo una propuesta atractiva para aquellos que desean industrializar el litio», ha añadido. Corfo seleccionará las compañías que ofrezcan una propuesta que incluya las mayores inversiones y que estén dispuestas a construir una cadena completa de suministro de litio y baterías en el norte del país.
El acuerdo permitirá a las empresas acceder al litio al precio más bajo del mercado y mitigar la volatilidad de los precios, dijo Sichel. Según Benchmark Mineral Intelligence, los precios del litio se han triplicado en los últimos cuatro años y estarán bajo presión este año debido a la nueva competencia que llegará al mercado, según afirma el analista del banco de Santander Pedro Miguel Pereira en una nota de investigación.