El cobre en la LME ha perdido un 4,5% en lo que va de semana, en camino de registrar su mayor desplome semanal desde noviembre de 2022.
Reuters.- Los precios del cobre caían el jueves por cuarta sesión consecutiva, ya que los inversores descargaban posiciones ante la persistente preocupación por la demanda china y la incertidumbre sobre las tasas de interés y el crecimiento mundial.
A las 1030 GMT, el cobre a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres (LME) bajaba un 0,6%, a 7.903 dólares por tonelada, acercándose a mínimos tocados en mayo.
El cobre en la LME ha perdido un 4,5% en lo que va de semana, en camino de registrar su mayor desplome semanal desde noviembre de 2022.
«Los datos económicos no son concluyentes en varios frentes. Estados Unidos tiene un fortalecimiento moderado en los datos económicos, lo que significa que no está claro que la Reserva Federal haya alcanzado el punto máximo en el endurecimiento monetario», dijo Nitesh Shah, de WisdomTree.
«El recorrido a medio plazo es de aumentos significativos de la demanda de cobre para la transición energética, pero el corto plazo es un poco más difícil porque la demanda sigue siendo débil desde China, donde los datos no están indicando que su economía esté avanzando de manera significativa», agregó.
El fuerte declive de los bonos sacudió el miércoles los mercados financieros, incluidas las materias primas, ya que empujó los precios de las notas del Tesoro a mínimos de 17 años y los inversores siguen preocupados por el gasto público estadounidense y el abultado déficit presupuestario.
La debilidad de la demanda de metales se ha visto acentuada recientemente por el aumento de los inventarios. Las existencias de cobre de la LME subieron a 169.900 toneladas, su máximo desde mayo de 2022 y más del triple desde mediados de julio, según mostraron datos de la LME el jueves.
En otros metales básicos, el plomo en la LME bajaba un 0,6%, a 2.104,50 dólares la tonelada; el níquel cedía un 0,8%, a 18.575 dólares; el aluminio restaba un 0,3%, a 2.239 dólares; el zinc caía un 0,5%, a 2.479,50 dólares; y el estaño subía un 0,4%, a 24.025 dólares.