Respaldada por una coalición de multimillonarios entre los que figuran Bill Gates y Jeff Bezos.
KoBold Metals, una start-up respaldada por una coalición de multimillonarios entre los que figuran Bill Gates y Jeff Bezos, ha comprometido 150 millones de dólares para desarrollar la mina de cobre-cobalto de Mingomba, en Zambia, de la que se dice que es el gran yacimiento sin explotar de mayor ley del metal naranja del mundo.
La start-up, que tiene como accionistas a Breakthrough Energy Ventures de Gates y a la principal minera del mundo, BHP, utilizará sus herramientas de inteligencia artificial para procesar datos de perforación y optimizar la exploración de cobre y cobalto en Mingomba.
KoBold participa en lo que será una empresa conjunta con los actuales propietarios del proyecto: la firma australiana de capital riesgo EMR Capital y el vehículo estatal de inversión minera de Zambia ZCCM-IH.
Mingomba contiene 247 millones de toneladas de mineral con una ley media del 3,64% de cobre. Según KoBold, esta cifra representa una ley seis veces superior a la de Chile, el primer país productor de cobre del mundo.
El desarrollo de la mina supondría una gran victoria para el Presidente de Zambia, Hakainde Hichilema, que se ha fijado un ambicioso objetivo de producción de cobre de 3 millones de toneladas anuales para 2032, frente a las cerca de 850.000 toneladas que produce el país en la actualidad.
“Nuestro mensaje al mundo es que Zambia está aquí, y está abierta a los negocios”, declaró Hichilema el miércoles en la Cumbre de Líderes África-Estados Unidos en Washington D.C.
“Esta inversión de hoy no es sobre KoBold, no es sobre ZCCM, no es sobre Zambia, es sobre todos ellos, y sobre el resto del mundo, mientras luchamos contra el cambio climático”, señaló.
El acuerdo de inversión, que otorgará a KoBold una participación mayoritaria en Mingomba, se cerrará en el primer trimestre de 2023.
El cobre tiene una gran demanda debido a su uso en energías renovables y vehículos eléctricos, pero los grandes yacimientos nuevos son escasos.
Se calcula que la industria mundial del cobre necesita gastar más de 100.000 millones de dólares para construir minas capaces de cerrar lo que podría ser un déficit de suministro anual de 4,7 millones de toneladas para 2030.
No es una minera
KoBold, como ha declarado su consejero delegado, Kurt House, no pretende ser un operador minero “nunca”.
La búsqueda de metales para baterías por parte de la empresa comenzó hace dos años en Canadá, tras adquirir los derechos de un área de unos 1.000 km2 en el norte de Quebec, justo al sur de la mina de níquel Raglan de Glencore.
Ahora cuenta con una docena de propiedades de exploración en lugares como Zambia, Quebec, Saskatchewan, Ontario y Australia Occidental, fruto de empresas conjuntas como con BHP y con BlueJay Mining para explorar minerales en Groenlandia.
El denominador común de esos activos es que contienen o se espera que sean fuentes de metales para baterías.
KoBold pretende crear un “Google Maps” de la corteza terrestre, con especial atención a la búsqueda de yacimientos de cobalto. Recoge y analiza múltiples flujos de datos -desde resultados de perforaciones antiguas hasta imágenes por satélite- para comprender mejor dónde podrían encontrarse nuevos yacimientos.
Los algoritmos aplicados a los datos recopilados determinan los patrones geológicos que indican un posible yacimiento de cobalto, que se da de forma natural junto con el níquel y el cobre.
Según la empresa, esta tecnología permite localizar recursos que podrían haber pasado desapercibidos para los geólogos de mentalidad más tradicional y puede ayudar a los mineros a decidir dónde adquirir tierras y perforar.
(Imagen referencial)