La empresa indicó que el cronograma de permisos con BLM debería permitirles perforar antes de finales de 2023.
Kraken Energy informó que el estudio de radón en curso realizada en su proyecto de uranio Apex, en el centro de Nevada, ha identificado con éxito múltiples objetivos de perforación prioritarios adicionales ubicados en el terreno «BLM» de la Oficina de Gestión de Tierras al oeste.
La interpretación de los estudios magnéticos VTEM y UAV realizados recientemente muestra una firma geofísica asociada con la mineralización de uranio en la mina Apex que parece estar desplazada hacia el norte, donde continúa con tendencia al noroeste.
La empresa señaló que esta firma geofísica coincide con anomalías de radón fuertes y consistentes recientemente identificadas.
Kraken Energy detalló algunos resultados del descubrimiento:
- Fuertes anomalías de radón coinciden con firmas geofísicas que describen el contacto mineralizado en la histórica mina de uranio Apex.
- Se han identificado más de 2 km de potencial objetivo de alta prioridad en el terreno BLM recientemente plantado que sigue la tendencia mineralizada del noroeste de la mina Apex.
- Área objetivo recién definida y no perforada previamente con profundidades objetivo proyectadas que varían de 50 m a 200 m.
- Se ha presentado un aviso de intención (NOI) al BLM para perforar hasta 2,200 m en 24 pozos desde 8 plataformas con el objetivo de comenzar a perforar antes de finales de 2023.
Matthew Schwab, director ejecutivo de Kraken, afirmó que la aplicación por parte de nuestro equipo de estudios geofísicos modernos y detallados y estudios de radón en la propiedad Apex ha identificado un área objetivo de perforación excepcional de múltiples capas y de alta prioridad ubicada al noroeste y a lo largo de la tendencia de la histórica mina de uranio Apex.
«Está claro que los operadores anteriores pasaron por alto esta posible extensión mineralizada de 2,0 km de largo de la mina Apex, que se ha desplazado hacia el norte como lo indican los datos geofísicos», sostuvo.
Schwab agregó que la combinación de datos geofísicos y de radón es una poderosa herramienta de localización, ya que el gas radón es un producto directo de la desintegración radiactiva del uranio.
«El hecho de que esta nueva área objetivo de perforación de alta prioridad esté dentro de terrenos de BLM también es muy positivo, ya que el cronograma de permisos con BLM debería permitirnos perforar antes de finales de 2023», dijo.