El empleo en el sector minero en el trimestre móvil septiembre-noviembre de 2022 alcanzó a 281.000 trabajadores.
La Sociedad Nacional de Minería (Sonami) informó que el empleo en el sector minero en el trimestre móvil septiembre-noviembre de 2022 alcanzó a 281.000 trabajadores, un año atrás, en el período septiembre-noviembre de 2021, registró 231.000 ocupados, esto es, un crecimiento de 22%, lo que corresponde a un total de 50.000 nuevos puestos de trabajo.
En las regiones del norte del país, ha aumentado significativamente el empleo minero en los últimos doce meses, en Tarapacá crece 34%, en Antofagasta aumenta 39%, en Atacama 8% y en Coquimbo 19%.
Álvaro Merino, Gerente de Estudios de SONAMI, destacó que “de las actividades económicas relevantes, la minería es la que registra mayor crecimiento en el nivel de ocupación, en los últimos doce meses”.
“Si bien es cierto que el empleo en la minería en un año muestra un relevante crecimiento, al observar las últimas tres mediciones se aprecia una disminución, pues al comparar el trimestre móvil julio-septiembre de 2022, donde se alcanzó el mayor registro histórico, que llegó a 289 mil trabajadores, con el último dato de 281 mil puestos de trabajo, se aprecia un retroceso en el empleo de 2,8%”, precisa el Ejecutivo de SONAMI.
Junto a lo anterior se debe destacar el importante incremento que ha tenido el empleo femenino en el sector minero, el cual en los últimos doce meses se ha elevado en un 42%. “El empleo femenino pasó de 26.000 personas ocupadas un año atrás a 37.000 en la actualidad, representando actualmente el 13,2?l empleo minero. La ocupación masculina, por su parte, creció 19.5%”, destacó Merino.
“El aumento del empleo femenino da cuenta de los avances que muestra la industria en la incorporación de las mujeres. La industria reconoce qué para seguir mejorando los estándares y la competitividad, se necesita del talento femenino, tanto en los niveles operativos, ejecutivos como también en el estrato directivo”, afirmó Álvaro.
Asimismo conluyó que “a medida que se despejen las incertidumbres y se retome con mayor vigor la inversión minera, el impacto multiplicador de esta impulsará el crecimiento del empleo y junto con ello, la disminución de la desocupación en las regiones del norte del país”.