Así lo señaló el informe “Medición de encadenamientos productivos de la industria minera en Chile”, realizado por Cochilco.
La Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) dio a conocer el informe “Medición de encadenamientos productivos de la industria minera en Chile”, donde se estiman los efectos inducidos atribuidos a las compras intermedias y por el proceso de inversiones.
En detalle, el texto tiene como objetivo aplicar una metodología objetiva que mida los impactos directos e indirectos que genera la actividad minera, de manera de identificar su evolución en el tiempo, y la capacidad de la actividad para generar valor económico en toda su cadena de valor.
El reporte señala que en términos directos la minería ha ponderado, en promedio, un 10% del PIB en el periodo 1996-2021. Con periodos como 2006 y 2007 donde superó el 20% y, como 1998, donde su aporte fue inferior al 5%.
Asimismo, el estudio menciona que entre 2008 y 2019, la minería fortaleció su efecto de arrastre, convirtiéndose en un dinamizador de la economía a partir de 2015, aunque mantuvo un bajo encadenamiento hacia adelante. Esto se produjo debido a que el sector minero se desplazó desde el cuadrante que agrupa a los sectores independientes hacia el de los sectores impulsores.
Sectores beneficiados
En cuanto a los efectos multiplicadores de la minería como sector, se indica que entre 2008 y 2019, el multiplicador del PIB minero pasó de US$1,45 a US$ 1,96. Esto quiere decir que en 2008 por cada dólar de PIB directo, la minería indujo indirectamente US$ 0,45 en otros sectores. Dicha relación aumentó a US$ 0,96 en el 2019.
Los sectores que se ven mayormente inducidos por la inversión y la compra de bienes y servicios para la producción de bienes mineros son: la intermediación financiera y los servicios empresariales, donde preponderancia de la minería en dicha industria se ha acrecentado, ya que su efecto inducido total alcanzó los US$ 0,33 por dólar de PIB directo en el periodo 2014-2019. Mientras que, en el otro extremo las industrias menos inducidas son los servicios personales y la Administración Pública.
Por otro lado, las actividades de arquitectura e ingeniería, generación y transmisión eléctrica representan el 31% del efecto inducido generado por la minería del cobre a partir de las compras intermedias. Por otro lado, la construcción de obras de ingeniería civil representa, por sí solo, el 42,2% del efecto inducido generado por las inversiones de la minería del cobre.