Solución de Weeefiner y Sensmet recibiría hasta $2 millones de cofinanciamiento durante tres años.
Las empresas finlandesas Weeefiner y Sensmet están desarrollando una solución que podrá proporcionar tratamiento de agua a sitios mineros al final de su vida útil y, al mismo tiempo, recuperar selectivamente minerales críticos y metales de tierras raras de las aguas afectadas por la minería.
El proyecto de la Unidad de recuperación inteligente (IRU) de las empresas recibió financiamiento del programa de desafío de tratamiento de agua sostenible de Rio Tinto Group, que puede otorgarles hasta $2 millones de cofinanciamiento durante tres años. Weeefiner estará a cargo de la solución de tratamiento de agua y recuperación de metales, mientras que Sensmet se ocupará de la tecnología de medición en línea para permitir el control continuo del proceso.
“Hasta la fecha, los métodos de tratamiento de agua en los sitios mineros se han centrado en la descontaminación por precipitación, que requiere grandes cantidades de productos químicos como la cal y representa una gran huella de carbono”, dijo Mikko Hänninen, CEO de Weeefiner, en un comunicado de prensa.
“Este proceso también produce lodos que contienen contaminantes y representan un desafío adicional de eliminación. En Weeefiner, nuestra tecnología 4D Scavenger altamente selectiva está diseñada para apuntar y extraer metales disueltos para su reutilización, lo que reduce significativamente la carga del tratamiento del agua corriente abajo. Los sitios mineros podrán utilizar la IRU para producir materias primas sostenibles y, al mismo tiempo, cumplir con los requisitos reglamentarios”, señaló el comunicado.
Aporte de Sensmet
Sensmet, por otro lado, pondrá a trabajar su analizador µDOES, que proporciona cuantificación simultánea en tiempo real de concentraciones de metales disueltos, como Ni, Co, Li, Mn y Cu en procesos hidrometalúrgicos y aguas mineras.
El sistema se ha diseñado para agilizar el proceso de medición con un rendimiento analítico comparable al de la espectroscopia de emisión óptica de plasma acoplado inductivamente en laboratorio, pero con la solidez necesaria para la monitorización continua y totalmente automatizada de procesos industriales.
“El µDOES mejora la IRU al medir las concentraciones de metales tanto antes como después del tratamiento 4D Scavenger, lo que permite la optimización automatizada del proceso”, afirma el comunicado.
El CEO de Sensmet, Toni Laurila, señaló que el analizador µDOES ha demostrado previamente las ventajas del análisis en tiempo real de las concentraciones de metales en los procesos de reciclaje y producción de baterías, lo que resulta en una mayor eficiencia, menores costos, mayor rendimiento y una mejor calidad del producto.
Cooperación con Rio Tinto
Weeefiner y Sensmet ahora están trabajando con Rio Tinto para desarrollar una solución que se pueda implementar en el campo. Inicialmente, el agua sintética se tratará en instalaciones de investigación en Finlandia para demostrar el control y la eliminación efectivos de metales clave como el cobre, el cobalto y el níquel. Una vez que se haya demostrado que la eliminación de estos elementos es efectiva, Rio Tinto suministrará muestras de sitios mineros cerrados que se someterán a una evaluación similar.
Después de que el concepto de extracción de minerales del agua de la mina haya sido probado en el laboratorio, se desarrollarán unidades piloto para la evaluación inicial en dos sitios mineros cerrados.
“Este es uno de nuestros proyectos de innovación más emocionantes y tenemos la esperanza de que nos permitirá recuperar metales estratégicos que de otro modo se habrían perdido”, dijo Nick Gurieff, asesor principal de investigación y desarrollo de tapones en Rio Tinto.
“Haremos un seguimiento de medidas como el costo de recuperación de un kilo de cobre, por ejemplo, y eso nos permitirá determinar si esta nueva tecnología podría autofinanciarse. Sin embargo, ese no es el objetivo principal; si podemos eliminar los metales de manera efectiva, el desafío ambiental se reducirá y el tratamiento posterior aguas abajo será mucho más fácil”, agregó.
En opinión de Gurieff, al recuperar metales estratégicos como el cobre de los desechos, el proyecto IRU probablemente contribuirá a una economía más circular y mejorará la disponibilidad de metales para baterías a medida que el mundo descarboniza su infraestructura energética y de transporte.