Tras la firma de un acta inicial para retomar el diálogo el próximo 10 de noviembre en Arequipa.
El Vicepresidente de Asuntos Corporativos de Hochschild, José Augusto Palma, manifestó su total rechazo ante el ataque perpetrado contra la unidad minera Inmaculada (Ayacucho) el lunes 31 de octubre.
Recordó que 30 pobladores del caserío Casma Palla Palla ingresaron ilegalmente a las instalaciones de la mina cortando el cero perimétrico, quemaron la garita de ingreso y el almacén temporal de residuos industriales, causando zozobra en más de 1700 colaboradores.
Estas mismas personas venían bloqueando la vía pública que se usa para llegar a Inmaculada desde el jueves 27 de octubre, impidiendo el ingreso de suministros y alimentos a la unidad
minera.
“Ha sido un acto de violencia injustificada”, sostuvo.
Durante la tarde, Palma informó que, tras varios intentos de diálogo, finalmente el grupo de pobladores de Casma Palla Palla aceptaron levantar el bloqueo de la carretera tras la firma de un acta inicial para retomar el diálogo el próximo 10 de noviembre en Arequipa.
Sin embargo, el Vicepresidente de Asuntos Corporativos alertó que este grupo de pobladores mantiene “la actitud de amenaza para volver a atacar nuestras instalaciones, desconociendo el contrato firmado en mayo pasado».
«Hacemos un llamado a la cordura. Estas acciones violentas son contrarias a nuestro ordenamiento legal y no deben permanecer impunes en un Estado de Derecho”, enfatizó.
Ante esta situación, Palma hizo un llamado de alerta a las autoridades competentes para que tomen las medidas necesarias para prevenir estas acciones violentas e ilegales que atentan contra la propiedad privada y contra ciudadanos de a pie que solo buscan trabajar y ganarse la vida honestamente.
“Nos estamos reuniendo con el Ministerio del Interior, así como con el Ministerio de Energía y Minas y otras autoridades; y seguiremos luchando por la paz social y la integridad de nuestros trabajadores”, mencionó.
Desde hace más de 60 años, Hochschild viene trabajando de manera responsable, con compromiso social y teniendo a las personas como prioridad. Así, la empresa minera se caracteriza por mantener un diálogo constante con sus diferentes grupos de interés y en generar relaciones a largo plazo que permitan generar un impacto positivo en el entorno donde opera.
La Unidad Minera Inmaculada opera desde el año 2015, genera alrededor de 3,000 puestos de trabajo directo (entre personal de planilla y contratistas) y, aproximadamente, 18,000 puestos de trabajo indirectos.