MINERÍA INTERNACIONAL. Exploración minera en México registra inversión mínima en diez años. Según informó la Cámara Minera de México (Camimex), la exploración minera en ese país registró inversiones por US$552 millones en el 2015, una baja interanual de 30,8%, lo que representó la caída más pronunciada entre los principales países mineros de América Latina.
El resultado significó también el tercer descenso continuo de México en este indicador, desde un máximo de US$1.290 millones alcanzado en el 2012, año en que lideró estas inversiones en la región.
Entre las empresas, un caso en línea con la tendencia fue el de Grupo México, el mayor productor de cobre del país y que redujo su gasto en exploración en más de una quinta parte desde el 2012, hasta unos US$49 millones en el año pasado.
El riesgo de desarrollo en la minería se concentra en las etapas de exploración y decrece conforme se avanza a la etapa de operación. Además de las grandes compañías, las empresas llamadas juniors (pequeñas y medianas) están más enfocadas a explorar.
En el 2015, las inversiones en exploración de los minerales no ferrosos sumaron US$644 millones en Chile, que registró una baja interanual de 19,3% y encabezó la atracción de este tipo de capitales en América Latina.
Perú quedó empatado con México al captar US$552 millones, pero su retroceso fue de sólo 3,2%, a tasa anual. A su vez, Brasil obtuvo US$276 millones en la exploración minera, una disminución de 19,3%.
La inseguridad, la falta de certeza legal y los nuevos impuestos afectaron la calificación de México como destino de atracción para las empresas mineras, de acuerdo con el Índice de Potencial Minero Internacional del Fraser Institute, con sede en Canadá.
México quedó en el lugar 37 de 109 jurisdicciones en el 2015, mientras que en la edición previa quedó en el sitio 33 de 122 lugares evaluados.
A nivel global, el sector minero ha sufrido impactos negativos a la para de la tendencia generalizada a la baja de los precios de diversos productos minerales.
En México, la Secretaría de Hacienda cobra desde el 2014 una nueva regalía de 7,5% sobre el flujo de operación de las empresas mineras y un nuevo derecho de 0,5% sobre sus ingresos de oro, plata y platino. Además, eliminó las deducciones fiscales de los gastos de exploración.
Según Sergio Almazán, director general de la Camimex, la minería mantiene tendencias cíclicas históricamente y pasó por un periodo al alza que comenzó desde finales del 2003 y culminó en el 2012.