El 24 y 25 de junio del presente año, se realizará Expo Mineros y Proveedores – MINPRO 2025, organizado por el Grupo Digamma. En el encuentro se abordarán temas determinantes para la actualidad y futuro del sector.
En la presente entrevista, Leandro García, Presidente del evento, analiza las perspectivas, el desempeño del sector y las tareas pendientes para impulsar los proyectos de exploración y
construcción minera que hay en cartera.
Desde su perspectiva, ¿Cuál es su balance sobre su desempeño de la minería peruana durante el 2024 y qué perspectivas proyecta para el sector en este año?
Por un lado, podemos afirmar que ha sido un año positivo desde la perspectiva económica del país, con un crecimiento del orden del 3% del PBI, impulsado en gran medida por el sector minero. En términos de producción, seguimos liderando a nivel global en los principales metales como plata, cobre, zinc, plomo, oro, entre otros.
Y para el año 2025, según el BCR, se esperan más de US$ 5.6 mil millones en inversiones mineras, con nuevos proyectos como San Gabriel, Tantahuatay Sulfuros, Zafranal, Tía María, entre otros. Esto representaría el 10% de los US$ 51 mil millones que el sector privado invertiría en el Perú durante próximo año. Todo ello traerá efectos positivos en el empleo, el desarrollo sostenible y el bienestar de millones de familias peruanas.
También puedes leer: Minería peruana en 2025: Preparando el impulso para el crecimiento
Sin embargo, el lado negativo es nuestra incapacidad como país para combatir la minería ilegal y abordar la formalización de la pequeña minería y minería artesanal. La extensión del Reinfo a fines del 2024 nos ha dejado muy preocupados, pues ello puede traer consecuencias sociales muy graves, perpetuar la informalidad y aumentar la delincuencia organizada.
Los próximos meses serán clave para afrontar esta situación de forma articulada y con un enfoque
flexible y progresivo que se adapte a las realidades locales y ofrezca apoyo técnico y financiero, con la supervisión de toda la cadena de suministros y proveedores, priorizando criterios laborales, de seguridad y salud, medioambientales y tributarios.
En el 2024, la minería confirmó su posición como una de las pocas actividades económicas que ubica al Perú en el mercado global. ¿Cuáles identificaría como las bases más importantes de este logro?
El Perú es un país minero de larga tradición y grandes atributos. Contamos con ingentes recursos naturales, estamos ubicados de forma estratégica en Sudamérica, tenemos apertura a mercados extranjeros con tratados de libre comercio y hemos construido un ecosistema minero de talla mundial con trabajadores talentosos, universidades e institutos técnicos de excelente categoría, así como proveedores y empresas peruanas y extranjeras de primer nivel.
Tenemos todo lo necesario para seguir haciendo que la minería sea parte fundamental de la columna vertebral de la economía y el desarrollo del país.
En la misma línea, ¿Cuáles diría que son las acciones que deberían desplegarse para mejorar las oportunidades de inversión en el país y, específicamente, en el sector minero?
Lo que está pendiente es mejorar la infraestructura a nivel nacional para aumentar así la competitividad de nuestro país, agilizar los trámites y permisos, pero, sobre todo, ofrecer más estabilidad a los empresarios. También será importante priorizar el diálogo y el trabajo articulado entre empresa, Estado y comunidades, a fin de mejorar nuestras relaciones sociales. Todo esto nos ayudará a tener un mejor clima de inversión.
Una de las deficiencias del sector minero en el Perú son las trabas para la concreción de nuevos proyectos mineros. ¿Cómo cree que debe corregirse esa traba? ¿Qué medidas deberían adoptar se para acelerar el desarrollo de los proyectos que han sido priorizados por el Minem?
Sacar adelante un proyecto minero desde la etapa de exploración hasta la construcción y posterior operación puede tomar, por lo menos, unos 20 años. La iniciativa de la Ventanilla Única Digital es positiva en ese sentido, pero esperamos que su implementación completa agilice los trámites administrativos, reduzca significativamente los tiempos de aprobación y facilite la inversión en el sector.
Además de ello, es importante promover la articulación entre el Estado y el sector privado e insistir con la simplificación normativa, medidas elementales para acelerar el desarrollo de los proyectos mineros en el país.
Lea la entrevista completa en nuestra edición 169 de Rumbo Minero, aquí.