Del total recaudado, la principal fuente de contribución fueron los ingresos tributarios de la Minería Metálica, que alcanzaron S/ 1732.5 millones, representando el 93.1% del monto total.
El subsector minero en el Perú constituye un pilar estratégico para el desarrollo nacional, desempeñando un papel fundamental en el financiamiento del Estado a través de diversas contribuciones económicas. Estas incluyen tanto ingresos tributarios provenientes de la Minería Metálica y Minería No Metálica; como obligaciones no tributarias como el Gravamen Especial a la Minería (recurso público), Regalías Mineras y las Nuevas Regalías Mineras (contraprestación
económica), que representan fuentes clave de recursos financieros.
Dichos aportes son esenciales para el presupuesto de los Gobiernos Nacional, Regionales y Locales, permitiendo la ejecución de proyectos destinados a mejorar el bienestar social, fortalecer la infraestructura y promover un desarrollo sostenible en los departamentos beneficiados.
En la apertura del 2025, la recaudación por conceptos vinculados al sector minero ascendió a S/ 1860.1 millones, reflejando un incremento interanual de 29.7% en comparación con los S/ 1434.3 millones recaudados en enero de 2024.
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Este incremento estuvo impulsado, principalmente, por el dinamismo de los ingresos tributarios provenientes de la minería metálica, que registraron un aumento del 32.0%, así como por el crecimiento del 13.9% en la recaudación de la minería no metálica.
Del total recaudado, la principal fuente de contribución fueron los ingresos tributarios de la Minería Metálica, que alcanzaron S/ 1732.5 millones, representando el 93.1% del monto total. Seguido por los ingresos tributarios de la Minería No Metálica con S/ 111.5 millones y lo recaudado por Regalías Mineras que aportaron S/ 15.7 millones, ambos conceptos representaron el 6.0% y 0.8% del total recaudado, respectivamente.
Se espera que en los próximos meses del 2025 la recaudación minera mantenga una tendencia al alza, impulsada por el dinamismo de la economía global y nacional, así como por la mejora en los precios del cobre y el oro. En un contexto de mayor demanda internacional de minerales, estos
factores reforzarían el papel del sector minero como una fuente clave de ingresos fiscales para el país, contribuyendo al financiamiento del desarrollo y la inversión pública.