MINERÍA. Volcan reportó una utilidad neta de US$1 millones en el tercer trimestre, lo que representó una caída de 96% respecto al mismo periodo del año anterior. Este resultado se explica principalmente por los menores precio de los metales, que impactaron negativamente en las ventas.
Entre julio y septiembre, el volumen de extracción de mineral aumentó 0.1% respecto al mismo lapso de tiempo del año anterior. Sin embargo, el volumen de mineral tratado tuvo una caída interanual de 2%. “La diferencia entre el volumen de extracción y el de tratamiento se explica principalmente por el stock de mineral que se acumuló en Alpamarca”, se lee en el informe de análisis y discusión de la gerencia de la minera. En consecuencia del menor volumen de mineral tratado, se dio una caída interanual en la producción de cobre (-18%), de zinc (-1%), de plomo (-13%) y de plata (-2%).
Las ventas de Volcan en el tercer trimestre ascendieron a US$189 millones, una caída interanual de 19%. Esto se dio por una disminución en las ventas antes de ajustes de 11% respecto al tercer trimestre del 2017, la cual fue causada por los menores precios de los metales, los menores volúmenes de venta de producción propia de zinc, plata y plomo, y la ausencia de ventas de concentrados de terceros. La caída en el precio de los metales también significó ajustes negativos sobre las ventas, que llegaron a ser -US$13 millones frente a los US$59 millones del tercer trimestre del año anterior.
La compañía minera reportó que su ebitdaen el tercer trimestre alcanzó los US$65 millones, un resultado 36% menor respecto al mismo periodo del año anterior. Así, el margen ebitda fue de 34%, nueve puntos porcentuales menos que el mismo periodo del 2017.
Las inversiones totales descendieron 13% respecto al tercer trimestre del 2017 y alcanzaron los US$46 millones. Las inversiones mineras —que representaron el 98% de las inversiones— sufrieron una caída interanual de 14%. Las inversiones en las unidades operativas subieron 7% respecto al mismo periodo del 2017 (US$44 millones) debido principalmente a la menor inversión en ‘relaveras’ y en infraestructura de minas. Además, la inversión en exploración greenfield —proyectos nuevos o en etapa inicial— tuvo una caída interanual fuerte (-95% interanual); sin embargo, ésta se explica ya que, desde este año, estas inversiones se reflejan directamente en el estado de resultados como gastos del periodo y ya no se capitalizan. Por otro lado, las inversiones en energía aumentaron 76% respecto al tercer trimestre del año anterior (US$700,000), impulsadas principalmente por la reparación de la central hidroeléctrica Rucuy, ubicada en Huaral.