Su implementación ha representado la construcción de un tercer circuito desde Chilca a Independencia en 220 kilovoltios. El proyecto contó con una inversión aproximada de US$ 13 millones.
Red de Energía del Perú (ISA REP) anuncia la puesta en operación comercial del proyecto «Ampliación 21», obra de gran envergadura cuyo objetivo es reforzar el sistema interconectado para garantizar la confiabilidad del suministro eléctrico en hogares e industrias en la costa del Perú, específicamente en la zona centro y norte del país. Su implementación ha representado la construcción de un tercer circuito desde Chilca a Independencia en 220 kilovoltios, así como la ampliación de subestaciones asociadas.
Con una inversión aproximada de US$ 13 millones, «Ampliación 21» requirió un alto grado de coordinación con otras empresas y entidades del sector, incluyendo el Comité de Operación Económica del Sistema Interconectado Nacional (COES), el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (OSINERGMIN) y el Ministerio de Energía y Minas (MINEM).
Asimismo, participaron diversas empresas especializadas que garantizaron la correcta ejecución de las actividades.
Avance en seguridad del suministro de energía
Lina Coy, gerente de Proyectos de ISA REP, destacó la importancia de esta iniciativa que se consolida como un hito para la compañía, debido al avance en seguridad del suministro de energía.
«En ISA REP seguimos apostando por el Perú y por el desarrollo energético. Este proyecto involucró el tercer circuito Chilca- Independencia en 220 kilovoltios, que recorre 168.5 kilómetros de líneas de transmisión, y además amplió las subestaciones Chilca e Independencia. Este es un avance significativo en la seguridad del suministro de energía, minimizando el riesgo de cortes de servicio por fallas o mantenimiento. Es así como se confirma el compromiso de implementar mejoras continuas para fortalecer la infraestructura energética del país», indicó la ejecutiva.
Asimismo, destacó que uno de los principales desafíos de la obra fue la intervención en infraestructura operativa con líneas energizadas, lo que requirió una planificación meticulosa para establecer fechas de corte en coordinación con otras empresas del sector.
Sobre el despliegue para la ejecución del proyecto, Coy añadió que «este proyecto involucró a más de 360 personas en el momento pico de construcción, acumulando un total de 414,250 horas-hombre trabajadas sin registrar accidentes, es así que seguimos avanzando, bajo esquemas de trabajo que promueven el cuidado por la vida y el bienestar de nuestros colaboradores».