El presidente del Directorio de Compañía de Minas Buenaventura, Roque Benavides, conversó de varios temas en el programa Rumbo Minero TV donde destacó la importancia de construir grandes reservorios de agua para distribuirla a la población del Valle del Tambo en Arequipa, y de esta manera contribuir con el desarrollo de la agricultura, ganadería y la minería en el país.
¿Cómo percibe usted que se desarrollará el crecimiento de la minería peruana este año?
Tenemos que hacer todo lo posible para que el crecimiento minero suceda. No es fácil. A veces nos falta convencer a las comunidades, pero creo que no debemos de retroceder en ese esfuerzo. El Perú tiene mucho potencial, no solamente en minería, sino en obras hídricas, turismo, agricultura, en todo. Creo que debemos ponernos de acuerdo los peruanos, que somos los principales inversionistas de nuestro territorio, para ‘sacar la cara’ por el país.
Cuando se plantea crecer 3 ó 4%, considero que estamos perdiendo oportunidades, pues deberíamos crecer a un ritmo de 6 ó 7%. Vemos el caso de la India con un crecimiento de 8% a 9%, con una gran fortaleza. Y el Perú también puede crecer.
Dicho crecimiento puede estar plasmado con la salida de los proyectos mineros. En ese sentido ¿Qué opinión le merece el comentario del presidente Martín Vizcarra sobre que el proyecto de Tía María no se iniciará en su Gobierno?
Claramente fue un comentario desafortunado, porque el Estado es una continuidad. Los presidentes son temporales entonces, a él no le correspondía decir en mi gobierno no.
Señores, vamos a seguir trabajando para que salga Tía María. Si es que sale en el Gobierno hasta julio del 2021, en hora buena. Pero en todo caso hay que seguir trabajando, y ver si es que hay el ambiente social para que se pueda desarrollar.
¿Qué opciones ve para la viabilidad del proyecto Tía María?
Yo soy de los que creo y en alguna oportunidad se lo dije al presidente Martín Vizcarra que hay que sacar el proyecto de Paltiture. En esa quebrada del Valle del Tambo hay varias zonas para construir reservorios. He caminado esas zonas porque tenemos el proyecto San Gabriel y hay mucho sitio (en las zonas altas del Valle) para construir reservorios.
Eso permitiría dar un mensaje a los agricultores y ganaderos, que lo que se hará con el proyecto Tía María se justificará con más agua, mejor calidad de agua, mayor oportunidad para desarrollar la agricultura y la ganadería y, por supuesto, un poquito de esa agua, usarlo para la mina.
Cuando me hablan de la desalinización me pregunto ¿de qué estamos hablando? El Perú es el octavo país con más recursos de agua en el mundo. El 85% del agua de lluvia el Valle del Tambo se va todos los años al mar, y ¿queremos desalinizar cuando botamos agua dulce al mar?
Como país ¿cómo podemos hacer para atraer más inversiones, cuando nosotros mismos nos ponemos algunas dificultades?
Considero que hacemos bien en ser autocríticos, pero aquél dicho en inglés que dice “el jardín del vecino siempre se ve más verde”, también es cierto. En el Perú tenemos muchos problemas y vamos solucionándolos. Otros países de la Región también tienen sus problemas. Por ejemplo, lo que vemos con nuestros hermanos chilenos es terrible, en Bolivia igual, en Argentina que no puede pagar la deuda, y Venezuela. Tomaría con pinzas el hecho de que el Perú tiene problemas, ya que vemos que estamos resolviéndolos.
Tenemos que exigir a las autoridades soluciones, y en ese sentido por supuesto podría ayudar a que los proyectos se desarrollen. El Perú tiene un gran problema de centralismo; y la verdad es que la minería puede contribuir a descentralizar nuestro país, por lo tanto, no debemos de perder tiempo.
Cuando veía esas inundaciones en Tacna o en el departamento de San Martín, me pregunto ¿qué pasa que no hacemos más reservorios? ¿por qué la minería no puede contribuir a que haya esa hermandad del agua de la que hablan algunos y que es muy importante?.
¿Qué hacer con aquellas personas antimineras, que obstruyen el desarrollo de los proyectos mineros?
No se pueden controlar las ideas. Considero que debemos tener cuidado. Una de las virtudes del país es que tenemos democracia y ello implica libertad de opinión. Los que no han sido convencidos por las bondades de la minería tienen derecho a oponerse, pero de ahí a destruir lo que se quiere hacer, eso está mal y está contra la ley. Estoy convencido que las ideas se combaten con ideas.
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