Perspectivas optimistas. Frente a un contexto global de precios bajos de los minerales y una menor demanda externa, los grandes proyectos mineros que vienen saliendo en el país – como Tía María, por ejemplo – contribuirán a una mejor producción y, con ello, una mejora del sector. ¿Cuáles son las expectativas para este segundo semestre? Rumbo Minero conversó con la Presidenta de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), Eva Arias, para tener respuesta a esta y otras interrogantes.
A poco más de medio año, ¿cómo evalúa el desarrollo del sector minero?
Desde fines del 2012 los precios de los minerales terminaron su súper ciclo. Este año ha sido más complicado que el anterior por la caída de precios y, en algunos casos, la disminución de producción. Por ejemplo, si hablamos de las cotizaciones, que es el tema básico por el cual nuestras exportaciones mineras han caído, entre enero y julio de este año, el precio del cobre cayó un 8%; y el oro, casi 15%. Ambos minerales son los principales productos de exportación minera y para Perú, el más importante es el cobre.
La situación no es del todo favorable si hablamos de precios.
Hasta julio de este año, por ejemplo, el precio de la plata también ha caído un 24%. Si bien hay una caída sustancial de precio no podemos decir que es algo inusual. Esta situación en el precio de los commodities mineros se da periódicamente. Hemos tenido fuertes crisis como la de 1977 y la del 2008, aunque fue muy corta. Esta vez la caída no ha sido tan dramática porque hemos tenido muchos años de bonanza. La reducción en el valor de exportación no ha sido tan grande porque el volumen de producción creció.
Entonces es imposible hablar de una crisis.
No hay una crisis acentuada. Los costos han subido y las empresas están en un proceso de adecuarse a la nueva realidad de precios. En algunos casos hay ampliaciones en curso que por mayor volumen les permite incrementar las ventas, absorber mejor los costos fijos y mantener los márgenes lo más alto posible. En otros casos, las estrategias estarán centradas a reducir egresos, con exploraciones por ejemplo, para una mejor sostenibilidad de la mina.
INVERSIONES MINERAS REGIONALES
Hasta junio de este año existe una cartera de 52 grandes proyectos mineros a nivel nacional que totalizan US$61 mil 279 millones. Sin embargo, hubo ciertos retrasos que pueden influir en el desarrollo económico no solo del sector, sino del país.
El retraso más notable es Conga, que no puede entrar en un franco de desarrollo. Actualmente sabemos que está en el manejo de los reservorios. Sin embargo, vemos también que hay otros casos como Tía María que están saliendo. Este proyecto en particular está próximo a iniciar la construcción, lo que significaría que en un par de años entraría en producción. Los proyectos de exploración son los que más han frenado por una escasez de capital. En este caso el segmento junior es el que más sufre.
Las inversiones mineras son el gran motor de las economías regionales, pero también representan un fuerte botín para las autoridades. A poco menos de un mes para los comicios electorales, ¿cómo ve el panorama de regiones como Ancash y Cajamarca?
Lamentablemente ahí sí estamos pasando una crisis difícil respecto a la capacidad de gestión que tienen muchas de las regiones para poder invertir bien estos fondos. Esto se suma a que nosotros como país tenemos que permitir que la población en general se beneficie con estos recursos y mejoren su calidad de vida. Creemos que los recursos generados por la minería (como las regalías, el canon, entre otros aportes) deben ir, en primer lugar, a satisfacer las necesidades básicas de la población. No puede ser que teniendo tanto dinero por canon, no tengan agua, obras de saneamiento, energía eléctrica, buenas escuelas ni hospitales.
Un tema en agenda es la redistribución del canon propuesto por el Ejecutivo. ¿Bajo qué criterios debería regirse esta nueva distribución?
Cuando hablamos de canon tenemos que pensar que deben ir para atender las demandas primarias de la población. Mientras no logremos hacer eso con los distritos donde se explota el mineral, la situación como país no cambiará. Y esto no pasa solo por establecer qué se debe hacer, sino también dar capacidades, competencias de gestión del gasto y formulación de proyectos a gobiernos locales y regionales. El gobierno central tendrá que acompañar para no tener lo que pasa ahora: cuántos funcionarios cuestionados que con todo este dinero disponible han caído en actos indebidos. Lo que debemos buscar en el país es desarrollo integral, no solo es cuestión de generar recursos. Hemos ido creciendo nuestro PBI pero tenemos que buscar el desarrollo como país.
EL ‘PAQUETE REACTIVADOR’
¿Qué opinión tiene sobre el denominado ‘Paquete reactivador? de la economía?
No ha sido el único momento en que el gobierno promueva medidas para fomentar la inversión. No hay muchas acciones por hacer inmediatas, pero, sin duda, van a ayudar al país en el mediano y largo plazo. La idea de estas iniciativas es que trasciendan los gobiernos. No son remedios para la coyuntura sino pensar más allá.
Uno de los principales puntos es la disminución de sobrecostos. Según estimados, los costos de producción para el rubro minería subirían 8% este año, ¿qué factores sustentan ello?
Pienso que los costos podrán reducirse. Lo que pasa es que la inflación minera, según expertos, ha crecido 20% anual, una cifra muy alta. Sin embargo, en el momento en que los precios bajan, lo que tienen que hacer las empresas es reducir costos buscando más eficiencia de la mano de una mayor producción. En la minería, usamos muchos productos de acero cuyos componentes son metálicos, entonces si sube el precio, sube las maquinarias. Por otro lado, está el tema de la oferta y demanda. Cuando hay muchas minas en construcción, los proveedores no se abastecen. Al haber una gran demanda y poca oferta los precios suben. Hay un proceso de ajuste que no es tan automático.
¿Considera que el aporte por regulación al OEFA representa un sobrecosto para las empresas mineras?
Cuando se producen temas como el aporte por regulación (porcentaje sobre las ventas) la industria busca reducir sus costos para que siga habiendo márgenes. Esto afecta porque las empresas no lo pueden controlar. Es un ingrediente ajeno a la industria. Normalmente lo que han ido teniendo las empresas, hasta este año, es un cobro por inspección. No solo es importante el tema monetario, sino cuánto se gasta en términos de moneda por tonelada producida porque es lo que finalmente se mide.
¿Cómo se podría llegar a un punto de equilibrio para el incentivo de inversión en estos sectores y una regulación ambiental?
En el caso de OEFA y OSINERGMIN son organismos fiscalizadores y la minería no está regulada. Entonces no corresponde pagar un aporte por inspección. Por otro lado, sí estamos de acuerdo en que haya una regulación ambiental adecuada y se respete, que sea buena para el país. La supervisión tiene que ser razonable. No tiene nada que ver con la normatividad ambiental porque son organismos fiscalizadores.
¿Considera que se pudo proponer otras políticas públicas para un mejor desarrollo de la industria minera?
Perú tiene que lograr ser más competitivo a nivel mundial. Una de las razones por las que no llegamos a ello es la gran brecha de infraestructura. Creo que el gobierno está haciendo bien las cosas en este sentido. Saca a licitación obras de trascendencia que puedan permitir, a lo largo del tiempo, que el país sea más competitivo, cerrando brechas. Esto, a su vez, permite otro tipo de formas de invertir tales como las asociaciones público – privadas. Un claro ejemplo son las obras por impuestos, que han facilitado obras importantes en las regiones. Esto, a mi parecer, tiene un doble propósito: disminuir la brecha y la dinamizar la economía nacional, creando más puestos de trabajo, un mayor consumo de insumos, entre otros.
LO QUE SE VIENE
Estando en la recta final, ¿cómo ve el sector minero al término de este año?
Creo que este segundo semestre debe ser mejor para el Perú en temas de producción. Respecto al cobre, el proyecto Toromocho está haciendo los ajustes y tienen que empezar producción más sustancial en lo que queda del año, lo que ayudará a un mejor panorama. Esperamos cerrar el año con un incremento del 10% en producción de cobre respecto al año pasado. Estoy segura que el 2015 será mejor.
Las elecciones están a la vuelta de la equina. ¿Podría afectar el sector minero?
El periodo electoral sí puede traer complicaciones en algunas zonas del país. Muchas veces existe la tentación de utilizar, en la política, algunas situaciones que no ayudan al desarrollo de las actividades económicas en general. Buscan notoriedad bajo una bandera electoral y eso sí podría generar problemas coyunturales. Es importante que los ciudadanos seamos conscientes a quién le estamos dando no un simple voto, sino el destino del país. Estamos dando un cheque en blanco y no debemos tan alegremente marcar si no sabemos a quién entregamos nuestro futuro y el de nuestros hijos.
¿Cómo puede la SNMPE aportar para un mejor desarrollo de la industria?
El aporte es trabajo en equipo. Las contribuciones cuando se dan en equipo llevan a un futuro mejor. Los mineros tenemos muchas cosas en común y, aunque la gente de hidrocarburos tiene retos diferentes, nos une el afán de un país más socialmente desarrollado. El tener la oportunidad de compartir experiencias ayuda muchísimo al desarrollo de nuestros sectores.
Ahora también en la Presidencia de la Sociedad Interamericana de Minería, ¿cómo evalúa la participación peruana en el sector minero a nivel regional?
Hay muchísimos problemas similares y otros particulares. Un problema muy serio es la extracción ilegal de minerales que es compartido con países de la Sociedad Interamericana de Minería como Colombia, Ecuador y Brasil. El tema de capital humano es importante. Hay países que van desarrollando como Chile y es algo que podemos tomar como base y replicarlo. Es un foro importante para intercambiar ideas, oportunidades de aprendizaje y permite, a su vez, tener un grado de unidad mayor en la industria.
Rumbo Minero Ed. 81
