María Cecilia Villegas, CEO de Capitalismo Consciente Perú, afirmó que lo que actualmente tenemos son muchas comunidades que ven a la gran minería como la ‘gallina de los huevos de oro’ a la que presionan.
Desde su perspectiva, ¿cuál son los principales factores que explican el actual contexto de conflicto en que se desenvuelve la minería peruana?
Lo que yo veo es que la base de lo que está ocurriendo hoy en la minería peruana es algo que está muy vinculado al principal problema que tiene el país: la enorme diferencia que existe entre el Perú formal y el Perú informal.
Y es que, como alguien lo ha definido en su momento, el Perú formal es como un club privado al que solo acceden unos cuantos, dejando al margen a una gran mayoría de peruanos. Esto se debe a que los costos de la formalidad son tan altos que la convierten simplemente en prohibitiva para ella. De hecho, el 78% de peruanos se desarrolla en la informalidad, lo que genera una serie de consecuencias en diversos ámbitos del país que han venido y vienen manifestándose también en la actividad minera.
Una de las cuales son los conflictos.
Así es, los cuales, además, se han agravado debido a que, en los últimos 20 años, desde que comenzó la oposición a la minería con la minera Manhattan, se han generado incentivos para que esas posiciones se fortalezcan y surjan incluso empresarios informales de la anti minería.
Ese es el caso de los hermanos Chávez Sotelo y distintas agrupaciones, sobre todo de izquierda, que van impulsando la anti minería y que van cuestionando a la minería formal. Ante esa situación, sin embargo, lo que ha ido haciendo la gran minería es ceder y darles a esos grupos cada vez mayores concesiones para poder sacar adelante sus proyectos, con lo que se ha ido encareciendo hacer minería en el país.
Además, como resultado de esa dinámica, lo que actualmente tenemos son muchas comunidades que ven a la gran minería como la ‘gallina de los huevos de oro’ a la que presionan, como lo estamos viendo hoy, mediante actos de extorsión.
Porque cuando una comunidad bloquea carreteras, lo hace porque quiere un contrato determinado, y eso se llama extorsión; no obstante, en el Perú nos hemos acostumbrado a no llamar las cosas por su nombre.
Lea la entrevista completa en nuestra edición 149 de Rumbo Minero.