Unión fuerte y resistente
La soldadura es un proceso de fabricación en el que se unen dos materiales diferentes, mayormente metales. Esta acción se obtiene por medio de la coalescencia de varios elementos en un objeto, de tal manera que las piezas son soldadas derritiendo los componentes y agregando un material de relleno derretido que posee un punto de mezcla.
Desde tiempos remotos, la soldadura ha jugado un rol muy importante en las sociedades, históricamente se dice que los primeros ejemplos de soldadura provenían desde la edad de bronce y la edad de hierro en Europa y en Oriente Medio.
Sin embargo, se presentaría oficialmente, durante el siglo XIX con Sir Humphry Davy quién descubriría el arco eléctrico, dando inicio a lo que hoy sería una de las técnicas más empleadas.
De ahí en adelante, la tecnología de la soldadura avanzaría rápidamente, y a mediados del siglo XX el proceso de la soldadura se llevaría a cabo a través de diferentes métodos, que dependían del tipo de material que se utilice, y la fuerza que se desee obtener entre las uniones.
La soldadura es actualmente uno de los mercados con mayor demanda en el sector industrial, especialmente en minería, debido a que, en estas operaciones a menudo se demanda de una variedad de servicios de fabricación para tuberías y equipos, así como trabajos personaliza dos basados en aplicaciones especializadas que incluyen accesorios, estructuras y mucho más.
Actualmente, los trabajos relacionados con la actividad minera representan la principal demanda de equipos de soldadura. Su uso en este sector es muy amplio en cuanto a la fabricación y a los mantenimientos correctivos para evitar los problemas que se ocasionan por la abrasión, el peso y la heterogeneidad de los minerales.
Es así que para ofrecer soluciones avanzadas de soldadura a este sector existe una diversidad de procedimientos o técnicas a aplicar.
Técnicas
En esa línea, dos de las técnicas más empleadas son la soldadura por fricción y la soldadura por arco. La primera es un procedimiento que aprovecha el calor generado por la fricción mecánica entre dos piezas en movimiento.
Esta soldadura que ayuda a reducir el costo en un 15% es utilizada para unir dos piezas, aún cuando una de ellas -por lo menos- sea de igual o distinta naturaleza, por ejemplo: acero de alto carbono y acero de bajo carbono, aluminio y aleaciones aluminio, acero y cobre, etc.