Mantener un régimen alimenticio apropiado para los trabajadores de una mina resulta vital para su organismo, debido al desgaste físico que puede demandarle algunas labores propias de esta actividad, por lo que hoy en día una dieta balanceada avalada por un especialista es una constante en los comedores de las unidades mineras.
Para la Oficina Internacional del Trabajo (OIT) la alimentación es un factor importante en las condiciones de salud de los trabajadores. Un mal suministro de ésta durante la etapa laboral puede causar pérdidas de hasta un 20% en la productividad de los trabajadores además de ocasionar algunas enfermedades que generan el ausentismo laboral y otros malestares que afectan directamente a los colaboradores.
Por ello las mineras ponen énfasis en el servicio de alimentación, a fin de brindar a sus colaboradores una comida adecuada durante el desayuno, almuerzo y cena para elevar su bienestar y productividad. Además, saben bien que el otorgar una buena dieta alimenticia, es uno de los aspectos más valorados por los empleados, y una de las herramientas más atractivas de las empresas para fidelizar a sus trabajadores, pues favorece siempre a mantener un clima laboral adecuado.
Una mala alimentación puede acarrear sobrepeso, obesidad y enfermedades como diabetes o anemia. Por lo tanto los especialistas recomiendan que ésta sea balanceada y llevar un estilo de vida saludable que no solo se debe cumplir dentro de la mina, sino también fuera de ella, cuando los trabajadores regresan a casa como parte de su jornada de trabajo.
Las empresas concesionarias encargadas de proveer el alimento a los cientos de trabajadores operan bajo altos estándares de salubridad, y tienen entre sus colabores a licenciados en nutrición que toman en cuenta las propiedades de los alimentos y los requerimientos energé de los consumidores, considerando a altura, los turnos y horarios, el clima y las actividades físicas.
En este aspecto hay que tomar en cuenta que quienes se desempeñan en tareas administrativas, requerirían un gasto energético diario que varía entre 2.200 y 2.400 calorías. Mientras que los supervisores y operadores de carga o maquinarias pesadas, tendrían un gasto energético de 2.400 a 2.600 calorías por día. Estos detalles son importantes para que el trabajador reciba los alimentos que su organismo necesita.
A continuación conozcamos cómo las empresas concesionarias realizan este arduo trabajo que demanda una interesante gestión administrativa y logística para proveer los alimentos a un gran número de trabajadores.
Informe Completo en la Página 82.