El apoyo será para un proyecto ubicado en Nevada que podría proveer litio para unos 370,000 vehículos eléctricos al año.
Una mina de litio de Nevada, considerada la segunda en Estados Unidos, está recibiendo el respaldo del presidente Biden.
Su administración se ha enfocado en aumentar el suministro nacional del mineral crítico necesario para fabricar baterías de vehículos eléctricos.
De acuerdo con Bloomberg, el Departamento de Energía emitió un compromiso condicional de hasta US$ 700 millones.
El monto será para el Proyecto Rhyolite Ridge Lithium-Boron de Ioneer, un posible proveedor de Ford Motor y Toyota Motor.
La empresa podría producir suficiente litio para 370,000 vehículos eléctricos al año.
Y los socios del proyecto incluyen al grupo de procesamiento de minería y metales Sibanye Stillwater.
Litio para EE. UU.
Conforme a Mining.com, la financiación se ejecuta a través del Programa de Préstamos para la Fabricación de Vehículos de Tecnología Avanzada.
Asimismo, ocurre cuando Biden busca crear una cadena de suministro de baterías domésticas en medio de un objetivo más amplio.
“Biden busca que, para fines de la década, la mitad de los vehículos vendidos en su país sean libres de emisiones”, reveló el portal.
Mercado
Se prevé que la demanda de litio, que también se utiliza para almacenamiento en red y armas, supere la producción actual para 2030.
Se debe recordar que Estados Unidos depende de los mercados internacionales para el procesamiento de la mayoría de las materias primas.
Si bien Asia domina actualmente el proceso de refinación de carbonato de litio, el depósito de Rhyolite Ridge es uno de los dos depósitos de litio-boro conocidos en el mundo.
Apuntes
Ioneer espera obtener las aprobaciones estadounidenses que le permitirán a la compañía comenzar a construir el proyecto el próximo año.
Con el objetivo de comenzar a producir litio en 2026, según la compañía.
Por otro lado, todavía necesita obtener la aprobación final del Departamento del Interior de EE. UU. porque las tierras públicas cercanas al sitio son el hogar de la flor silvestre en peligro de extinción, el trigo sarraceno de Tiehm.
El Departamento de Energía dijo que la compañía invirtió US$ $1.2 millones en investigación para preservar la planta y revisó su plan de minería para evitar impactos directos en la planta.